Volumen VI – Psicopatología de la vida cotidiana (1901
Volumen VI – Psicopatología de la vida cotidiana (1901
Volumen VI – Psicopatología de la vida cotidiana (1901
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
un automóvil, y mucha gente que entra y sale. Pienso, entre<br />
mí, que los empleados tendrán tiempo justamente para mis<br />
poquitas coronas; con seguridad me <strong>de</strong>spacharán enseguida,<br />
entregaré los billetes que quiero cambiar y diré: "Por favor,<br />
déme usted oro [Gold]". En el acto noto mi error —yo<br />
<strong>de</strong>bía pedir p<strong>la</strong>ta— y <strong>de</strong>spierto <strong>de</strong> mis fantasías. Estoy ya a<br />
unos pocos pasos <strong>de</strong> <strong>la</strong> puerta <strong>de</strong> entrada, y veo a un joven<br />
que viene en dirección contraria; se me antoja conocido, pero<br />
a causa <strong>de</strong> mi miopía no puedo discernirlo con seguridad.<br />
Cuando se aproxima, lo reconozco como un condiscípulo<br />
<strong>de</strong> mi hermano, <strong>de</strong> nombre Gold {oro}, <strong>de</strong> cuyo hermano,<br />
un escritor famoso, yo había esperado al comienzo<br />
<strong>de</strong> mi carrera literaria el generoso patrocinio. Pero este no<br />
sobrevino, y entonces tampoco el esperado éxito material <strong>de</strong><br />
que se ocupaba mi fantasía en el camino al banco. Por tanto,<br />
ensimismado yo en mis fantasías, <strong>de</strong>bo <strong>de</strong> haber apercibido<br />
al señor Gold, que se aproximaba, y para mi conciencia, que<br />
soñaba con éxitos materiales, ello se figuró en <strong>la</strong> forma <strong>de</strong><br />
pedir yo al cajero oro —en lugar <strong>de</strong> p<strong>la</strong>ta, <strong>de</strong> menor valor—.<br />
Pero, por otro <strong>la</strong>do, el hecho paradójico <strong>de</strong> que mi<br />
inconciente pueda percibir un objeto que mi vista sólo <strong>de</strong>s-,<br />
pues es capaz <strong>de</strong> reconocer parece explicable, en parte, en<br />
virtud <strong>de</strong>l "apronte <strong>de</strong> complejo" {"Complexbereitschaft"}<br />
(Bleuler);*'' como vimos, este se hal<strong>la</strong>ba dirigido a lo material,<br />
y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el comienzo, contra mi mejor saber, había guiado<br />
mis pasos hacia aquel edificio, el único en el cual se<br />
cambia papel moneda y oro».<br />
A <strong>la</strong> categoría ** <strong>de</strong> lo maravilloso y ominoso pertenece<br />
también <strong>la</strong> singu<strong>la</strong>r sensación, que uno registra en diversos<br />
momentos y circunstancias, <strong>de</strong> que uno ya habría vivencindo<br />
exactamente eso mismo, que habría estado alguna vez en<br />
idéntica situación, y sin que ningún empeño permita recordar<br />
con niti<strong>de</strong>z aquello anterior que así se manifiesta. Sé<br />
que no hago sino seguir el uso lingüístico <strong>la</strong>xo si l<strong>la</strong>mo «sensación»<br />
a aquello que nos mueve en todos esos momentos;<br />
sin duda se trata <strong>de</strong> un juicio, y en verdad <strong>de</strong> un juicio <strong>de</strong><br />
discernimiento, pero estos casos poseen un carácter particu<strong>la</strong>rísimo,<br />
y no <strong>de</strong>be <strong>de</strong>scuidarse el hecho <strong>de</strong> que nunca se<br />
recuer<strong>de</strong> lo buscado. Yo no sé si este fenómeno <strong>de</strong> lo «<strong>de</strong>ja<br />
vu» pue<strong>de</strong> tomarse en serio como prueba <strong>de</strong> una existencia<br />
psíquica anterior <strong>de</strong>l individuo; lo cierto es que los psí-<br />
*•! [Bleuler, 1910a.]<br />
** [Lo que sigue, hasta <strong>la</strong> frase «un <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> mejorar <strong>la</strong> situación»<br />
(pág. 259), data <strong>de</strong> 1907.]<br />
257