11.07.2015 Views

Untitled

Untitled

Untitled

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

CAPÍTULO XLIII. ' 395llanura inmediata al campo de batalla. «¡Un campeón , un campeón.'» gritaron á un mismo tiempo los espectadores ; y en despechode la preocupación general y de los errores que dominaban enaquella época de tinieblas, la presencia del desconocido escitó losaplausos de la muchedumbre. Sin embargo , perdieron toda esperanzalos que se interesaban en la suerte de Rebeca. El caballodel forastero, que sin duda habia hecho una larga jornada, parecíal'atigadisimo; y el ginete, sea por cansancio, ó por debilidad,ó por ambas causas juntas, apenas podía mantenerse sobre lasilla.A las preguntas de los heraldos acerca de su nombre y clase, ydel objeto que allí le traía, el caballero respondió con firmeza yprontitud : «Soy un noble y buen caballero, que vengo á sostenercon lanza y con espada la justa causa de Rebeca, hija de Isaac deYork, contra la sentencia pronunciada en su juicio, la que declarofalsa é inicua; y á desafiar á sir Brian de Bois-Guilbert, como traidor,homicida y embustero. Y lo probaré en este campo de batalla,con mis armas y con la ayuda de Dios, de la Virgen y de san Jorgeel buen caballero.—El forastero debe probar ante todo, djjo Malvoisin, que ha sidoarmado caballero, y que es de noble linaje. Los campeones del Templeno pelean con hombres desconocidos.—Mi nombre, dijo el caballero alzando la visera, es mas noble, ymi linaje mas puro que el tuyo, Malvoisin. ó'o soy AVilfrido deIvanhoe.—No seré yo quien pelee contigo , dijo Brian demudado y trémulo.Cúratelas heridas, toma mejor caballo, y puede ser que recibasuna lección de mi mano por esta pueril fanfarronada.—Bien podias tener presente, dijo Ivanhoe, que dos veces has cedidoal impulso de mi lanza, Orgulloso templario , acuérdate delpaso de armas de Ashby; acuérdate de tu insensata jactancia en elsalón de ('edric, cuando diste tu cadena de oro contra mi relicario,en prenda de que pelearlas con Ivanhoe, y que recobrarías el honorde que te despojó su brazo. Por aquel bendito relicario, por la santareliquia que contiene , juro que te declararé cobarde en todas lascortes de Europa, en todos los preceptorios de tu Orden , si no tomaslas armas inmediatamente.»Bois-Guilbert volvióla vista hacia Rebeca, con todas las señalesde la irresolución; después echó una mirada feroz á Ivanhoe; y es-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!