05.08.2013 Views

Librodot En busca del tiempo perdido I Marcel ... - Biblioteca Virtual

Librodot En busca del tiempo perdido I Marcel ... - Biblioteca Virtual

Librodot En busca del tiempo perdido I Marcel ... - Biblioteca Virtual

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

dificultades materiales con menos largueza que el anterior, en que le<br />

dio 5000 francos, o no le regalaba un collar de diamantes que ella<br />

quería, no reavivaría en su querida aquella admiración por su<br />

generosidad, aquella gratitud que tan feliz lo hacían, y hasta corría el<br />

riesgo de que Odette pensara que su amor disminuía al ver<br />

reducidas las manifestaciones con que aquel cariño se expresaba. Y<br />

entonces se preguntó de pronto si aquello que estaba haciendo no era<br />

cabalmente entretenerla, como si en efecto, esta noción de entretener<br />

pudiera extraerse, no de elementos misteriosos ni perversos, sino<br />

pertenecientes al fondo diario y privado de su vida, lo mismo que ese<br />

billete de 1000 francos, roto y repegado, doméstico y familiar, que su<br />

ayuda de cámara le ponía en el cajón de la mesa, después de pagar la<br />

casa y las cuentas, y que él mandaba a Odette con cuatro más., y si no<br />

se podía aplicar a Odette, desde que él la conocía .porque no se le<br />

pasó por las mientes que antes de conocerlo a él hubiera podido<br />

recibir dinero de nadie. ese dictado que tan incompatible con ella se<br />

figuraba Swann de mujer entretenida.. Pero no pudo ahondar en esa<br />

idea, porque un acceso de pereza de espíritu, que en él eran<br />

congénitos, intermitentes y providenciales, llegó en aquel momento y<br />

apagó todas las luminarias de su inteligencia, tan bruscamente,<br />

como andando el <strong>tiempo</strong>, cuando hubiera luz eléctrica, podría dejarse<br />

una casa a oscuras en un momento. Su pensamiento anduvo a tientas un<br />

instante por las tinieblas; se quitó los lentes, limpió sus cristales, se<br />

pasó las manos por los ojos, y no volvió a vislumbrar la luz hasta que<br />

tuvo <strong>del</strong>ante una idea completamente distinta, a saber: que el mes<br />

próximo convendría mandar a Odette 6000 o 7000 francos en vez de<br />

5000, por la sorpresa y la alegría que con eso iba a darle.<br />

La noche que no estaba en casa esperando que llegara la<br />

hora de ver a Odette en casa de los Verdurin, o en uno de los<br />

restaurantes de verano <strong>del</strong> Bosque o de Saint-Cloud, donde les<br />

gustaba mucho ir, se marchaba a cenar a alguna de aquellas elegantes<br />

casas donde, antes era asiduo convidado. No quería romper el<br />

contacto con personas que quién sabe si podían ser útiles a Odette<br />

algún día, y a quienes ahora utilizaba a veces para alguna cosa que le<br />

pedía Odette. Además, estaba muy acostumbrado desde hacía<br />

<strong>tiempo</strong> a la vida aristocrática y al lujo, y aunque había aprendido<br />

con la costumbre a despreciar una y otro, sin embargo, los necesitaba;<br />

de modo que en cuanto se le aparecieron exactamente en el mismo<br />

plano las casas más modestas y las mansiones ducales, tan habituados<br />

estaban sus sentidos a los palacios, que sentía necesidad de no estar<br />

siempre en moradas modestas. Le merecían la misma consideración<br />

.con tal identidad, que hubiera parecido increíble las familias de clase<br />

<strong>Librodot</strong> <strong>En</strong> <strong>busca</strong> <strong>del</strong> <strong>tiempo</strong> <strong>perdido</strong> I <strong>Marcel</strong> Proust<br />

228

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!