05.08.2013 Views

Librodot En busca del tiempo perdido I Marcel ... - Biblioteca Virtual

Librodot En busca del tiempo perdido I Marcel ... - Biblioteca Virtual

Librodot En busca del tiempo perdido I Marcel ... - Biblioteca Virtual

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

amante, reconocida y satisfecha, y él tendría esa gran alegría de<br />

verla; alegría de la que estaba privado hacía casi una semana y que no<br />

admitía sustitución por otro placer alguno. Porque en cuanto<br />

Swann podía representarse a Odette sin horror leyendo la bondad de su<br />

sonrisa y sin que los celos superpusieran a su amor el deseo de<br />

quitársela a otro, ese amor tomaba preferentemente la forma de<br />

<strong>del</strong>eite ante las sensaciones que le daba la persona de Odette, y<br />

ante el placer de admirar como un espectáculo, o interrogar como un<br />

fenómeno, su modo de alzar los ojos, el formarse de una sonrisa suya o<br />

la emisión de una entonación de su voz. Y ese placer, distinto a<br />

cualquier otro, acabó por crear en él una necesidad que sólo ella podía<br />

saciar con su presencia o con sus cartas; necesidad casi tan<br />

desinteresada, tan artística, tan perversa, como esa otra que<br />

caracterizaba el período nuevo de la vida de Swann, en que, a la<br />

sequedad y depresión de años anteriores, sucedió una especie de<br />

superabundancia espiritual, sin que él supiera el porqué .como no sabe<br />

un enfermo por qué de pronto empieza a fortificarse y a<br />

engordar, camino de una total curación.; esa otra necesidad, que se<br />

desarrollaba también, aparte <strong>del</strong> mundo real: la de oír música y conocer<br />

música.<br />

Así, con aquella alquimia de su enfermedad, una vez que<br />

había hecho celos con su amor, se ponía a fabricar cariño y<br />

compasión hacia Odette. Ya era otra vez Odette la buena, la amable<br />

Odette. Tenía remordimientos de haberla tratado con dureza.<br />

Deseaba que se acercara a él; pero antes quería darle algún<br />

gusto, para ver cómo la gratitud se pintaba en su cara y mo<strong>del</strong>aba su<br />

sonrisa.<br />

Y por eso, Odette, segura de que Swann volvería al cabo de<br />

unos días tan cariñoso y sumiso como antes, a pedirle que hicieran las<br />

paces, se acostumbró a no tener ya miedo a desagradarlo, hasta irritarlo,<br />

y cuando le parecía bien le negaba los favores que más en estima tenía<br />

él.<br />

Quizá no se daba cuenta Odette de lo sincero que Swann era con<br />

ella cuando regañaban, y cuando le dijo que no le mandaría más dinero<br />

y que procuraría hacerle daño. Quizá tampoco sabía cuán sincero<br />

era, si no con Odette, por lo menos consigo mismo, en otros casos en<br />

que, mirando por el porvenir de sus relaciones, para mostrar a Odette<br />

que podía pasarse sin ella y que siempre era posible la ruptura, decidía<br />

quedarse algún <strong>tiempo</strong> sin ir por su casa.<br />

Muchas veces hacía eso Swann, tras unos días en los que<br />

Odette no le había dado ningún disgusto nuevo; y como sabía que de<br />

las visitas próximas que le hiciera no habría de sacar ninguna<br />

<strong>Librodot</strong> <strong>En</strong> <strong>busca</strong> <strong>del</strong> <strong>tiempo</strong> <strong>perdido</strong> I <strong>Marcel</strong> Proust<br />

258

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!