Para comprender EL LIBRO DEL GÉNESIS - 10
Para comprender EL LIBRO DEL GÉNESIS - 10
Para comprender EL LIBRO DEL GÉNESIS - 10
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
déos, semareos y jámateos, son desconocidos por lo<br />
demás en el Antiguo Testamento.<br />
Si dejamos a un lado esos nueve pueblos añadidos<br />
posteriormente, quedan como hijos de Canaán:<br />
Sidón, cuyo rango es superior, ya que es el primogénito,<br />
y Het. Canaán abarca aquí no sólo el territorio<br />
de Palestina con sus habitantes, sino también la<br />
Fenicia, lo cual, si bien es correcto desde el parentesco<br />
racial y lingüístico entre los habitantes de una<br />
y otra región, no es corriente en el Antiguo Testamento,<br />
donde Canaán suele significar la tierra<br />
prometida, la que fue ocupada por Israel. Sidón<br />
representa a toda la Fenicia (también en Homero; y<br />
en 1 Re 16,31 a un rey de Tiro se le llama «rey de los<br />
sidonios»).<br />
El otro hijo de Canaán es Het, el pueblo hitita.<br />
Los hititas son nombrados habitualmente entre los<br />
pobladores de Canaán (por ej.: en Gn 15,20). Aparecen dos<br />
veces en las narraciones de los patriarcas: Abraham compró<br />
una ñnca a los hititas para el enterramiento de Sara<br />
(Gn 23); Esaú se casó con dos mujeres hititas (Gn 26,34;<br />
27,46; 36,2). Ezequiel, polemizando con Israel, le atribuye<br />
un origen cananeo: de padre amorreo y de madre hitita<br />
(Ez 16,3). Betsabé, la que iba a ser madre de Salomón,<br />
estaba casada con Urías, un hitita (2 Sm 11,3). ¿Eran estos<br />
hititas restos dispersos de aquel gran imperio hitita que en<br />
el segundo milenio a.C, partiendo de Asia Menor, se extendió<br />
hasta la llanura entre el Líbano y el Antilíbano, e hizo<br />
incursiones guerreras hasta Egipto? Es la opinión corriente.<br />
Pero también puede ser que Het, hitita, sea el nombre<br />
genérico de toda la población aborigen de Palestina. Esto<br />
parece lo más probable, ya que los asirios llamaban a<br />
Palestina «el país de los hititas». Por tanto, estos «hititas»<br />
tendrían poco que ver con el imperio hitita. Así pues, con<br />
mencionar a Sidón y a Het se abarcaba las dos partes del<br />
territorio de Canaán: Fenicia y Palestina.<br />
Los jebuseos son los habitantes de Jerusalén hasta los<br />
tiempos de David (Jos 15,8; 18,28; Jue 1,21; 19,<strong>10</strong>; 2 Sm<br />
5,6-9). En cuanto a los amorreos, con ese nombre, «Amurru»,<br />
designaban los babilonios todo el territorio de Siria<br />
y Palestina. En el Antiguo Testamento unas veces se llamará<br />
así preferentemente a los antiguos habitantes de la<br />
montaña de Palestina central; otras veces en general a toda<br />
la población preisraelita; aquí se entiende en sentido más<br />
estricto, como uno más de los pobladores de Palestina. Los<br />
guirgaseos ñguran en las listas de pobladores, pero no<br />
sabemos nada de ellos. De los jiveos tenemos noticias<br />
imprecisas; se los menciona en Palestina central (Gn 34,2;<br />
8 2 PARA COMPRENDER <strong>EL</strong> <strong>LIBRO</strong> D<strong>EL</strong> <strong>GÉNESIS</strong><br />
Jos 9,7; 11,19), pero también «al pie del Hermón» (Jos<br />
11,3). Los arkeos y los sineos no son mencionados ninguna<br />
otra vez en el Antiguo Testamento. Arvad era una<br />
importante ciudad insular en Fenicia, mencionada también<br />
en Ez 27,8.11. Más al sur estaba Semar. «Jamat del<br />
Orontes» es mencionada frecuentemente en el Antiguo<br />
Testamento, situada en el curso del río Orontes, la más<br />
importante ciudad fenicia de tierra adentro.<br />
«Después se extendieron las estirpes de los cananeos»:<br />
no se dice que fuera por medio de la guerra,<br />
como en Mesopotamia: bastaba con el crecimiento<br />
espontáneo de generación en generación y la expansión<br />
consiguiente. Los límites del territorio cananeo<br />
resultante no son de fácil interpretación; hay que<br />
recordar que por entonces no había mapas. Por el<br />
norte comenzaba el territorio en Sidón. Por el sur<br />
llegaba hasta Guerar por tierra adentro y hasta Gaza<br />
por la costa. Por el suroeste alcanzaba hasta las ciudades<br />
del Mar Muerto. Lo cual se puede entender de<br />
dos maneras: o que el límite se determinaba tirando<br />
una línea desde Guerar y Gaza, o tirándola desde<br />
Sidón. Pero éstas son precisiones excesivas para<br />
aquellos tiempos. Simplemente se señalan algunas<br />
ciudades famosas en los extremos (Admá y Seboyim<br />
parecen añadidas posteriomente. De Lesa no sabemos<br />
nada). El narrador J ha querido precisar que<br />
aquellas ciudades cuya maldad y desastroso fin se va<br />
a narrar en el cap. 19 eran cananeas.<br />
20. El narrador P hace su resumen: «Éstos son<br />
los hijos de Cam, con sus estirpes y sus lenguas, en sus<br />
tierras y naciones». Igual que en el v. 5.<br />
21. Otra vez el redactor final intercala información<br />
tomada de J: «También le nacieron hijos a Sem,<br />
padre de todos los hijos de Heber y hermano mayor de<br />
Jafet». Las explicaciones añadidas a la simple<br />
afirmación primitiva de que a Sem le nacieron hijos<br />
tienen la intención de ensalzar a Sem. En primer<br />
lugar, él es el antepasado de todos los hijos de Héber,<br />
lo cual debía de ser importante, quizás porque el glosador<br />
entendía que Sem era por lo mismo el<br />
antepasado de todos los «hebreos», nombre que<br />
abarcaba, junto a otros pueblos, también a los israelitas.<br />
En segundo lugar, Sem era, a pesar de que en<br />
este capítulo es mencionado el último y Jafet el primero,<br />
el primogénito, anterior a Jafet (9,18).