17.01.2014 Views

LA FASCINACION DEL MAL

LA FASCINACION DEL MAL

LA FASCINACION DEL MAL

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

144 / María Susana Cipolletti y Fernando Payaguaje<br />

- Llévame a mí también, para pasear -<br />

Y lo llevé, y juntos habíamos tumbado [los árboles]. Los pilares<br />

los cortamos con hacha, los labramos bien bonito, eso era para la cocina.<br />

[…] Y luego cuando ya terminamos hemos traído las hojas de cinc<br />

para hacer el techo.<br />

Cuando terminamos todo eso, como crecían hierbas en la pista,<br />

las limpiábamos, y cuando limpiábamos él pagaba los [jornales] diarios.<br />

Nos explicó:<br />

- Ustedes pueden hacer minga, 41 reunir gente y limpiar -<br />

Así cuidábamos la pista de Puerto Bolívar. Luego él se fue a vivir<br />

a Limoncocha y venía de vez en cuando.<br />

Cuando él ya se llevaba bien con la gente se llevó a mi hija para<br />

que fuera a Quito con él y cuidara a su hijo. Y dijo:<br />

- Si tardo mucho tiempo [en regresar], pueden ir al Comando para<br />

comunicarse -<br />

Cinco meses había pasado allá, y mi hijo había ido al Comando<br />

para que ella volviera. Le envió un telegrama y al día siguiente ya había<br />

regresado mi hija. El la había llevado para que cuidara al hijo mayor,<br />

porque la señora tenía que dar luz al otro, y no había quien lo cuide.<br />

Por eso cuando [el misionero] volvió, ya tenía otro hijo, y así han vuelto<br />

para estar en Puerto Bolívar.<br />

Y después, cuando ya vivía allá, me pidió que fuera a enseñarle el<br />

idioma secoya. Me llevó a Limoncocha, sólo fuí, estuve tres semanas en<br />

Limoncocha. El misionero mismo regresó para traerme, y luego volví a<br />

ir con mi esposa. Cuatro meses estuvimos allá, enseñándole para que<br />

hable secoya. Y un siona fue conmigo, también para enseñar.<br />

Cuando estábamos allá, mi esposa se enfermó. No con enfermedad<br />

de allá, sino con enfermedad de watí. 42 Yo le dí de tomar, y ella ya<br />

estaba mejor. Y la misionera dijo:<br />

- Ya les toca volver -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!