17.01.2014 Views

LA FASCINACION DEL MAL

LA FASCINACION DEL MAL

LA FASCINACION DEL MAL

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

164 / María Susana Cipolletti y Fernando Payaguaje<br />

papá, que había ido a recoger un machete que había dejado en la orilla,<br />

lo había acompañado a llegar hasta arriba.<br />

- El me ha hecho daño, pero yo voy a ir a morir en mi casa -<br />

Cuando llegó a la casa ya tenía fiebre y desmayos. El otro hombre<br />

cocinó entonces yajé, y como mi papá era kuraka, se levantó y él<br />

mismo se sacó lo que el otro le había hecho [las flechas]. Luego me<br />

pidió que le preparara tabaco, y como yo era muy pequeño no podía<br />

hacerlo, así que lo hizo un sobrino. Mi papá tomó el tabaco en sus<br />

manos, y salió fuera de la casa. Ahí afuera se transformó en yái ñamasé.<br />

Es parecido a un venado pero con dientes de tigre. Se transformó en<br />

él y se fue. Como [mi papá] estaba muy enojado, se había ido a la casa<br />

de él [el dañador]. Pero cuando llegó vio que en la casa estaba también<br />

su pariente, el que lo había ayudado a ir hasta arriba. Cuando lo vio, se<br />

detuvo, y regresó. Si no, hubiera acabado con toda la familia de ese<br />

kuraka.<br />

Luego este kuraka, que había hecho daño a mi papá, vino a la<br />

casa a curarlo, pero tenía miedo, temblaba. Se sentó a curar y se cayó<br />

para atrás, pero rápido se levantó. Se había caído [de miedo] porque<br />

había visto a mi papá convertido en watí. Porque cuando ese watí se<br />

acerca a una persona, [ésta] muere inmediatamente. Le come el corazón<br />

o cualquier otra parte. Y se muere en seguida.<br />

Al día siguiente, mi papá dijo:<br />

- Voy a ir a mi propia casa, para morir allí -<br />

Entonces se embarcó en la canoa, guardaron sus cosas, y otros<br />

familiares lo trajeron en canoa hacia arriba [del río], donde vivíamos.<br />

El estaba acostado en la hamaca, y luego pasó por allí un watí, pâi jóyo<br />

watí. Al pasar, ese watí le habló a mi papá. El lo oyó, pero yo no escuché<br />

nada:<br />

- ¿Por qué viene enfermo? -<br />

Las otras personas no escucharon nada. Cuando llegaron a la<br />

casa, el suegro le preguntó:

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!