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tercer libro Cincuenta sombras liberadas

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a sacarle por ahora? Me lleva hasta la cocina, coge un taburete y se encamina al otro lado de la isla de lacocina.—Siéntate —me ordena.—¿Dónde está la señora Jones? —pregunto mientras me encaramo al taburete notando su ausencia porprimera vez.—Les he dado a Taylor y a ella la noche libre.Oh.—¿Por qué?Me mira durante un segundo y vuelve a su tono de diversión arrogante.—Porque puedo.—¿Y vas a cocinar tú? —Se percibe claramente la incredulidad en mi voz.—Oh, mujer de poca fe… Cierra los ojos.Uau… Yo pensé que íbamos a tener una pelea de mil demonios, y aquí estamos, jugando en la cocina.—Que los cierres —insiste.Primero pongo los ojos en blanco y después obedezco.—Mmm… No es suficiente —dice.Abro un ojo y le veo sacar un pañuelo de seda color ciruela del bolsillo de atrás de sus vaqueros. Hacejuego con mi vestido. Demonios… Le miro extrañada. ¿Cuándo lo ha cogido?—Ciérralos —me ordena de nuevo—. No vale hacer trampas.—¿Me vas a tapar los ojos? —pregunto perpleja. De repente estoy sin aliento.—Sí.—Christian… —Me coloca un dedo sobre los labios para silenciarme.¡Quiero hablar!—Hablaremos luego. Ahora quiero que comas algo. Has dicho que tenías hambre. —Me da un beso breveen los labios. Noto la suave seda del pañuelo contra los párpados mientras me lo anuda con fuerza en la partede atrás de la cabeza—. ¿Ves algo? —pregunta.—No —digo poniendo los ojos en blanco (figurativamente).Se ríe.—Siempre sé cuando estás poniendo los ojos en blanco… y ya sabes cómo me hace sentir eso.Frunzo los labios.—¿Podemos acabar con esto cuanto antes, por favor? —le respondo.—Qué impaciente, señora Grey. Tiene muchas ganas de hablar. —Su tono es juguetón.—¡Sí!—Primero te voy a dar de comer —sentencia y me roza la sien con los labios, lo que me calmainstantáneamente.Vale, lo haremos a tu manera. Me resigno a mi destino y escucho los movimientos que Christian hace porla cocina. Abre la puerta de la nevera y coloca varios platos sobre la encimera que hay detrás de mí. Caminahasta el microondas, mete algo dentro y lo enciende. Me pica la curiosidad. Oigo que baja la palanca de latostadora, que gira la rueda y el suave tictac del temporizador. Mmm… ¿Tostadas?

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