10.07.2015 Views

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—¿Adónde vamos, señora Grey? —me pregunta.—A Seattle Independent Publishing. —Me acomodo en el asiento de atrás del coche, cierro los ojos yapoyo la cabeza en el reposacabezas. Debería estar feliz. Sé que debería estar feliz. Pero no lo estoy. Esdemasiado pronto. Mucho más que demasiado pronto. ¿Qué va a pasar con mi trabajo? ¿Qué voy a hacer conSeattle Independent Publishing? ¿Y qué va a ser de Christian y de mí? No. No. No. Vamos a estar bien. Él vaa estar bien. Le encantaba Mia cuando era un bebé, recuerdo que Carrick me lo dijo, y también la adoraahora. Tal vez debería avisar a Flynn… Quizá no debería decírselo a Christian. Quizá… quizá deberíaponerle fin. Freno mis pensamientos, alarmada por la dirección que están tomando. Instintivamente bajo lasmanos para colocarlas protectoramente sobre mi vientre. No. Mi pequeño Bip. Se me llenan los ojos delágrimas. ¿Qué voy a hacer?Una imagen de un niño pequeño con pelo cobrizo y brillantes ojos grises corriendo por el prado en la casanueva aparece en mi mente, tentándome y llenándome la cabeza de posibilidades. Ríe y chilla encantadomientras Christian y yo le perseguimos. Christian le coge en brazos y le levanta para hacerle girar y despuésle lleva apoyado en la cadera mientras los dos vamos caminando de la mano hasta la casa.La imagen se deforma en Christian apartándose de mí con expresión de disgusto. Estoy gorda y tengo elcuerpo raro, con el embarazo muy avanzado. Camina por la larga sala de los espejos, alejándose de mí, y oigoel eco de sus pasos resonando contra los espejos plateados, las paredes y el suelo. Christian…Abro los ojos sobresaltada. No. Va a montar en cólera.Cuando Sawyer para delante de Seattle Independent Publishing, salto del coche y me dirijo al edificio.—Ana, qué alegría verte. ¿Cómo está tu padre? —me pregunta Hannah en cuanto entro en la oficina. Lamiro fríamente.—Está mejor, gracias. ¿Puedo hablar contigo en mi despacho?—Claro. —Parece sorprendida cuando me sigue al interior—. ¿Va todo bien?—Necesito saber si has cambiado o cancelado citas con la doctora Greene.—¿La doctora Greene? Sí. Dos o tres creo. Sobre todo porque estabas en otras reuniones o te habíasretrasado. ¿Por qué?¡Porque ahora estoy embarazada, joder!, grito dentro de mi cabeza. Inspiro hondo para tranquilizarme.—Si me cambias alguna cita, ¿puedes asegurarte de que yo lo sepa? No siempre reviso la agenda.—Claro —dice Hannah en voz baja—. Lo siento. ¿He hecho algo mal?Niego con la cabeza y suspiro.—¿Puedes prepararme un té? Luego hablaremos de lo que ha pasado mientras he estado fuera.—Claro. Ahora mismo. —Más animada, sale de la oficina.Miro a mi ayudante mientras se va.—¿Ves a esa mujer? —le digo en voz baja al bip—. Es probable que ella sea la razón de que estés aquí. —Me doy unas palmaditas en el vientre y entonces me siento como una completa idiota por estar hablando conel bip. Mi diminuto Bip. Niego con la cabeza enfadada conmigo misma y con Hannah… aunque en el fondosé que no puedo culpar a Hannah. Desanimada, enciendo el ordenador. Tengo un correo de Christian.De: Christian Grey

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!