10.07.2015 Views

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

20Me quedo mirando a la doctora Greene con la boca abierta mientras se hunde la tierra bajo mis pies. Unbebé. Un bebé. No quiero un bebé… Todavía no. Joder. Christian se va a poner furioso.—Señora Grey, está muy pálida. ¿Quiere un vaso de agua?—Por favor. —Apenas se oye mi voz. Mi mente va a mil por hora. ¿Embarazada? ¿Cuándo?—Veo que le ha sorprendido.Asiento sin palabras a la amable doctora, que me pasa un vaso de agua de un surtidor convenientementesituado allí al lado. Le doy un sorbo agradecida.—Estoy en shock —le susurro.—Podemos hacer una ecografía para saber de cuánto está. A juzgar por su reacción, sospecho que solohabrán pasado un par de semanas desde la concepción y que estará embarazada de cuatro o cinco semanas.Por lo que veo no ha tenido ningún síntoma.Niego con la cabeza sin palabras. ¿Síntomas? Creo que no.—Pensaba… Pensaba que era un tipo de anticonceptivo muy seguro.La doctora Greene levanta una ceja.—Normalmente lo es, cuando la paciente se acuerda de ponerse las inyecciones —dice un poco fría.—Debo de haber perdido la noción del tiempo…Christian se va a poner hecho una furia, lo sé.—¿Ha tenido pérdidas?Frunzo el ceño.—No.—Es normal con la inyección. Vamos a hacer la ecografía, ¿vale? Tengo tiempo.Asiento perpleja y la doctora Greene me señala una camilla de piel negra que hay detrás de un biombo.—Quítese la falda y la ropa interior y tápese con la manta que hay en la camilla —me dice eficiente.¿La ropa interior? Esperaba que me hiciera una ecografía por encima del vientre. ¿Por qué tengo quequitarme las bragas? Me encojo de hombros consternada, hago lo que me ha dicho y me tapo con la suavemanta blanca.—Bien. —La doctora Greene aparece en el otro extremo de la camilla tirando del ecógrafo para acercarlo.Se trata de un equipo de ordenadores de alta tecnología. Se sienta y coloca la pantalla de forma que las dospodamos verla y después mueve la bola que hay en el teclado. La pantalla cobra vida con un pitido—.Levante las piernas, doble las rodillas y después abra las piernas —me pide.Frunzo el ceño, extrañada.—Es una ecografía transvaginal. Si está embarazada de pocas semanas, deberíamos poder encontrar elbebé con esto —dice mostrándome un instrumento alargado y blanco.Oh, tiene que estar de broma.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!