10.07.2015 Views

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

tercer libro Cincuenta sombras liberadas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Hasta que pueda valerse por sí misma de nuevo. No lo sé. —Se encoge de hombros—. ¿Por qué?—¿Hay otras?—¿Otras?—Otras ex a las que hayas ayudado.—Hubo una. Pero ya no.—¿Oh?—Estudiaba para ser médico. Ahora ya está graduada y además tiene a alguien en su vida.—¿Otro dominante?—Sí.—Leila me dijo que adquiriste dos de sus cuadros.—Es cierto, aunque no me gustaban mucho. Estaban técnicamente bien, pero tenían demasiado color paramí. Creo que se los quedó Elliot. Como los dos sabemos bien, Elliot carece de buen gusto.Suelto una risita y Christian me rodea con el otro brazo, lo que hace que se derrame agua por un lado de labañera.—Eso está mejor —me susurra y me da un beso en la sien.—Se va a casar con mi mejor amiga.—Entonces será mejor que cierre la boca —dice.Me siento más relajada después del baño. Envuelta en el suave albornoz del Heathman me fijo en las bolsasque hay sobre la cama. Vaya, aquí debe de haber algo más que ropa para dormir… Le echo un vistazo a una.Unos vaqueros y una sudadera con capucha azul claro de mi talla. Madre mía… Taylor ha comprado ropapara todo el fin de semana. ¡Y además sabe la que me gusta! Sonrío y recuerdo que no es la primera vez quecompra ropa para mí cuando hemos estado en el Heathman.—Aparte del día que viniste a acosarme a Clayton’s, ¿has ido alguna vez a una tienda a comprarte tuscosas?—¿Acosarte?—Sí, acosarme.—Tú te pusiste nerviosa, si no recuerdo mal. Y ese chico no te dejaba en paz. ¿Cómo se llamaba?—Paul.—Uno de tus muchos admiradores.Pongo los ojos en blanco y él me dedica una sonrisa aliviada y genuina y me da un beso.—Esa es mi chica —me susurra—. Vístete. No quiero que vuelvas a coger frío.—Lista —digo. Christian está trabajando en el Mac en la zona de estudio de la suite. Lleva vaquerosnegros y un jersey de ochos gris y yo me he puesto los vaqueros, una camiseta blanca y la sudadera concapucha.—Pareces muy joven —me dice Christian cuando levanta la vista de la pantalla con los ojos brillantes—. Ypensar que mañana vas a ser un año más mayor… —Su voz es nostálgica. Le dedico una sonrisa triste.—No me siento con muchas ganas de celebrarlo. ¿Podemos ir ya a ver a Ray?

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!