23.12.2020 Views

La bruja negra

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Sabes, Elloren Gardner —me dice al fin Diana con amabilidad—, cuando tu

hermano y yo nos apareemos, tú y yo seremos hermanas.

Me vuelvo para mirarla sorprendida.

—Formarás parte de mi familia —prosigue—, tanto si te conviertes en lupina

como si no.

La soledad, el miedo, el hecho de no ser capaz de volver a casa para estar con mi

tío, la pérdida de mi colcha, los riesgos que estamos corriendo, el intenso conflicto

que he visto en los ojos de Yvan… De pronto, todas esas cosas me invaden, y cierro

los ojos con fuerza, avergonzada de estar llorando sobre la manta que tengo debajo.

Noto la mano de Diana en la cabeza, lo que me hace llorar todavía con mayor

empeño.

—Vuestra forma de vivir no es natural —dice acariciándome el pelo—. Alejados

los unos de los otros, tan solos. A mi familia les gustarás mucho, Elloren Gardner.

—No les gustaré —contesto sorbiendo por la nariz—. Verán que me parezco a mi

abuela y me odiarán. Como todos los que no son gardnerianos.

—No, confiarán en lo que yo opino de ti y les gustarás, Elloren Gardner, aunque

seas tan distinta. Lo que has hecho… liberar a esta selkie, con lo débil que eres… Has

sido muy valiente.

Su cumplido me pilla desprevenida. Sus elogios me animan y mi vergüenza

empieza a disiparse. Diana siempre parece estar sufriendo por tener que estar rodeada

de no lupinos, por lo que su buena opinión parece más valiosa y me siento como si

me la hubiera ganado.

—No encajo en ninguna parte —le digo.

—Encontrarás tu sitio en mi manada —insiste Diana—. Estoy segura. Creo que

deberías pasar el próximo verano con nosotros.

Dejo de llorar mientras considero la idea improbable de pasar el verano con

Diana.

¿Y si tiene razón? ¿Y si su pueblo me acepta? ¿Realmente ganaré una familia

cuando Diana y Rafe se conviertan en pareja?

Diana y Jarod ya han mencionado a su hermana pequeña Kendra en más de una

ocasión. ¿Ella también se convertirá en parte de mi familia? ¿Y la madre de Diana?

Quizá seamos amigas.

Me siento un poco esperanzada.

Me tranquiliza mucho notar el contacto de su amable mano en la cabeza. Es muy

agradable sentir el contacto de otra persona y empiezo a notar cómo me libero de

parte del estrés que tenía dentro.

—No has dudado en ayudarme —le digo—. No has dudado en ayudar a la selkie.

Gracias.

Diana asiente.

—Estaré encantada de tenerte como hermana algún día —le digo.

Y me doy cuenta sorprendida de que lo digo muy sinceramente.

Página 364

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!