13.05.2013 Views

el-capital-ii

el-capital-ii

el-capital-ii

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

maquinaria. En las instalaciones ferroviarias, por ejemplo, este punto debe examinarse de<br />

antemano con toda atención, como nos dice Adams: “Toda la construcción debe descansar<br />

sobre <strong>el</strong> principio que preside una colmena: capacidad para extenderse ilimitadamente.<br />

Todas las estructuras excesivamente sólidas y de antemano simétricas son perjudiciales,<br />

pues, en caso de extensión, deben ser destruidas” (p. 123).<br />

El sitio disponible juega aquí un pap<strong>el</strong> <strong>capital</strong>. A algunos edificios se les pueden<br />

agregar pisos, otros tienen que ampliarse en extensión, lo que requiere más terreno. En la<br />

producción <strong>capital</strong>ista se derrochan, por una parte, muchos recursos y, por otra, se realizan<br />

muchas extensiones contraproducentes de superficie de esta clase (perjudicando en parte a<br />

la fuerza de trabajo) cuando se trata de ampliar gradualmente las industrias, porque nada se<br />

realiza con sujeción a un plan, sino que todo depende de circunstancias, de medios, etc.,<br />

infinitamente variados de que dispone <strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista individual. Y esto se traduce en un gran<br />

despilfarro de las fuerzas productivas.<br />

En la agricultura es donde más fácil resulta esta reinversión gradual d<strong>el</strong> fondo de<br />

reserva en dinero (es decir, de la parte d<strong>el</strong> <strong>capital</strong> fijo que vu<strong>el</strong>ve a convertirse en dinero).<br />

Un campo de producción de extensión dada es susceptible, aquí, de la mayor absorción<br />

progresiva de <strong>capital</strong>. Y lo mismo acontece allí donde se efectúa una reproducción natural,<br />

como en la ganadería.<br />

El <strong>capital</strong> fijo supone gastos especiales de conservación. Una parte de la<br />

conservación se efectúa por obra d<strong>el</strong> mismo proceso de trabajo; <strong>el</strong> <strong>capital</strong> fijo se deteriora<br />

cuando no funciona en <strong>el</strong> proceso de trabajo (véase libro I, cap. VI, p. 166 y cap. XIII, p.<br />

356: desgaste de la maquinaria producido por <strong>el</strong> desuso). Por eso la ley inglesa considera<br />

expresamente que constituye un daño <strong>el</strong> hecho de que las tierras arrendadas no se cultiven<br />

con arreglo a los usos d<strong>el</strong> país (W. A. Holdsworth, Barrister at Law, The Law of Landlord<br />

and Tenant, Londres, 1857, p. 96). Esta conservación determinada por <strong>el</strong> uso en <strong>el</strong> proceso<br />

de trabajo constituye un don natural gratis d<strong>el</strong> trabajo vivo. Y la virtud conservadora d<strong>el</strong><br />

trabajo actúa de dos formas. Por una parte, conserva <strong>el</strong> valor de los materiales de trabajo, y<br />

lo transfiere al producto; por otra parte, conserva <strong>el</strong> valor de los medios de trabajo en la<br />

medida en que no lo transfiere también al producto, al conservar su valor de uso, por medio<br />

de la acción que ejerce en <strong>el</strong> proceso de producción.<br />

Pero <strong>el</strong> <strong>capital</strong> fijo requiere, además, una inversión positiva de trabajo, para ponerlo<br />

en condiciones de funcionar. La maquinaria necesita limpiarse de vez en cuando. Es éste un<br />

trabajo adicional, sin <strong>el</strong> cual se inutilizaría para <strong>el</strong> uso: se trata, simplemente, de<br />

contrarrestar ciertas influencias nocivas <strong>el</strong>ementales, inseparables d<strong>el</strong> proceso de<br />

producción; es decir, de mantener la maquinaria en estado de funcionamiento, en <strong>el</strong> sentido<br />

más literal de la palabra. El tiempo normal de duración d<strong>el</strong> <strong>capital</strong> fijo se calcula,<br />

naturalmente, partiendo d<strong>el</strong> supuesto de que se cumplan las condiciones bajo las cuales<br />

puede funcionar normalmente durante este tiempo, d<strong>el</strong> mismo modo que al calcular que <strong>el</strong><br />

hombre puede vivir 30 años por término medio se da por supuesto que habrá de lavarse.<br />

Aquí, no se trata tampoco de reponer <strong>el</strong> trabajo contenido en la máquina, sino que se trata<br />

d<strong>el</strong> trabajo adicional constante que requiere su uso. No se trata d<strong>el</strong> trabajo que realiza la<br />

máquina, sino d<strong>el</strong> que se realiza en <strong>el</strong>la, d<strong>el</strong> trabajo en que la máquina no es agente de<br />

producción, sino materia prima. El <strong>capital</strong> invertido en este trabajo forma parte d<strong>el</strong> <strong>capital</strong><br />

circulante, aun que no entre en <strong>el</strong> verdadero proceso de trabajo al que debe su origen <strong>el</strong><br />

producto. Este trabajo tiene que invertirse constantemente en la producción y, por tanto, su<br />

valor tiene que reponerse también constantemente mediante <strong>el</strong> valor d<strong>el</strong> producto. El

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!