el-capital-ii
el-capital-ii
el-capital-ii
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
comprarle su fuerza de trabajo y se lo repone mediante una parte d<strong>el</strong> <strong>capital</strong>–mercancías producidas en II, o<br />
sean, 500v en mercancías; <strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista posee ahora en forma de mercancías <strong>el</strong> mismo v que poseía en dinero<br />
antes de comprar la fuerza de trabajo; <strong>el</strong> obrero, por su parte, realiza <strong>el</strong> valor de su fuerza de trabajo en dinero<br />
y ahora vu<strong>el</strong>ve a realizar este dinero al invertirlo como renta en atender a su consumo, mediante la compra de<br />
una parte de los medios de consumo producidos por él mismo. Es <strong>el</strong> intercambio de la renta d<strong>el</strong> obrero en<br />
dinero por los 500v en mercancías d<strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista reproducida por aquél bajo esta forma. De este modo, este<br />
dinero retorna al <strong>capital</strong>ista II como forma–dinero de su <strong>capital</strong> variable. Un valor–renta equivalente en forma<br />
de dinero repone aquí <strong>el</strong> valor d<strong>el</strong> <strong>capital</strong> variable en forma de mercancías.<br />
El <strong>capital</strong>ista no se enriquece por <strong>el</strong> hecho de que, al vender al obrero una masa equivalente de<br />
mercancías, le sustraiga de nuevo <strong>el</strong> dinero que le pagó al comprar su fuerza de trabajo. Si le pagase primero<br />
500 al comprarle la fuerza de trabajo y le entregase gratis la masa de mercancías por valor de 500 que le ha<br />
hecho producir, le pagaría en realidad doble. Y, por <strong>el</strong> contrario, si <strong>el</strong> obrero le produjese un equivalente de<br />
500 en mercancías por <strong>el</strong> precio de su fuerza de trabajo de 500, <strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista se encontraría después de<br />
realizar esta operación exactamente donde se encontraba antes. Pero <strong>el</strong> obrero reproduce un producto de<br />
3,000: conserva la parte d<strong>el</strong> valor constante d<strong>el</strong> producto, es decir, <strong>el</strong> valor de los medios de producción<br />
contenidos en él = 2,000, al transformarlos en un producto nuevo, y además añade a este valor dado un valor<br />
de 1,000 (v + p). (La idea según la cual <strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista se enriquece obteniendo una plusvalía por <strong>el</strong> reflujo de<br />
los 500 en dinero aparece desarrollada en Destutt de Tracy, y a <strong>el</strong>la nos referiremos más extensamente en <strong>el</strong><br />
apartado 13 de este capítulo.)<br />
Mediante la compra de medios de consumo por valor de 500 <strong>el</strong> obrero II reintegra al <strong>capital</strong>ista en<br />
dinero II <strong>el</strong> valor de 500 IIv que hasta hace poco poseía en forma de mercancías; es decir, se lo reintegra bajo<br />
la forma en que aquél primitivamente lo desembolsó. Resultado inmediato de esta transacción, como de<br />
cualquier otra venta de una mercancía, es la transposición d<strong>el</strong> valor dado de la forma–mercancía a la forma–<br />
dinero. Y tampoco constituye nada específico <strong>el</strong> retorno así efectuado d<strong>el</strong> dinero a su punto de partida. Si <strong>el</strong><br />
<strong>capital</strong>ista II hubiese comprado con los 500 en dinero mercancías al <strong>capital</strong>ista I, vendiendo luego a I<br />
mercancías por valor de 500, habría recuperado también los 500 en dinero. Los 500 en dinero le habrían<br />
servido solamente para circular una masa de mercancías de 1,000 y habrían refluido, según la ley general<br />
expuesta más arriba, a manos de aqu<strong>el</strong> que lanzó <strong>el</strong> dinero a la circulación para hacer circular esta masa de<br />
mercancías.<br />
Pero los 500 en dinero que refluyen al <strong>capital</strong>ista II son, al mismo tiempo, nuevo <strong>capital</strong> variable<br />
potencial en forma de dinero. ¿Por qué? El dinero, incluyendo también por consiguiente <strong>el</strong> <strong>capital</strong>–dinero,<br />
sólo es <strong>capital</strong> variable potencial porque y en la medida en que puede invertirse en fuerza de trabajo. El<br />
retorno de las 500 libras esterlinas en dinero al <strong>capital</strong>ista II va acompañado por <strong>el</strong> retorno al mercado de<br />
fuerza de trabajo II. El retorno de ambos en polos opuestos –y, por tanto, la reaparición de los 500 en dinero,<br />
no sólo como dinero, sino también como <strong>capital</strong> variable en forma de dinero– se halla condicionado por <strong>el</strong><br />
mismo procedimiento. El dinero = 500 refluye al <strong>capital</strong>ista II porque vende al obrero II medios de consumo<br />
por valor de 500, es decir, porque <strong>el</strong> obrero gasta su salario para poder mantenerse y mantener a su familia,<br />
conservando con <strong>el</strong>lo su fuerza de trabajo. Para poder seguir viviendo y actuando como vendedor su<br />
mercancía, no tiene más remedio que vender una y otra vez, constantemente, su fuerza de trabajo. Por eso, <strong>el</strong><br />
retorno de los 500 en dinero al <strong>capital</strong>ista II es, al mismo tiempo, <strong>el</strong> retorno o <strong>el</strong> mantenimiento de la fuerza<br />
de trabajo como mercancía susceptible de ser comprada por los 500 y, por tanto, <strong>el</strong> retorno de los 500 en<br />
dinero como <strong>capital</strong> variable potencial.<br />
Con respecto al sector IIb, productor de artículos de lujo, <strong>el</strong> problema, en lo tocante a v– (IIb) v–, se<br />
plantea en los mismos términos que con r<strong>el</strong>ación a Iv. El dinero que renueva en forma de dinero <strong>el</strong> <strong>capital</strong><br />
variable de los <strong>capital</strong>istas de IIb afluye a <strong>el</strong>los por medio de un rodeo, a través de los <strong>capital</strong>istas de IIa. Sin<br />
embargo, no supone diferencia alguna <strong>el</strong> que los obreros compren sus medios de subsistencia directamente a<br />
los productores <strong>capital</strong>istas a quienes venden su fuerza de trabajo o a otra categoría de <strong>capital</strong>istas, que luego<br />
se encargan de hacer que <strong>el</strong> dinero retorne a manos de aquéllos. Como la clase obrera vive al día, compra<br />
mientras puede comprar. No ocurre lo mismo con los <strong>capital</strong>istas, por ejemplo, en <strong>el</strong> cambio de IIc por 1,000<br />
Iv. El <strong>capital</strong>ista no vive al día. El móvil que le impulsa es obtener <strong>el</strong> mayor rendimiento posible de su <strong>capital</strong>.<br />
Por consiguiente, si se presentan en circunstancias de cualquier clase por virtud de las cuales <strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista II<br />
considera más ventajoso retener, parcialmente al menos, durante más tiempo en forma de dinero su <strong>capital</strong><br />
constante, en vez de renovarlo inmediatamente, se demorará <strong>el</strong> reflujo a I de los 1,000 IIc (en dinero) y<br />
también, por tanto, la restauración de los 1,000 en forma de dinero, y <strong>el</strong> <strong>capital</strong>ista I sólo podrá seguir<br />
produciendo en la misma escala que antes si cuenta con dinero de reserva; <strong>el</strong> <strong>capital</strong> de reserva en dinero es