Cosmovisión mEsoAmERiCAnA - Universidad Mesoamericana
Cosmovisión mEsoAmERiCAnA - Universidad Mesoamericana
Cosmovisión mEsoAmERiCAnA - Universidad Mesoamericana
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
252<br />
hoRaCio CabezaS CaRCaChe<br />
95 Santo domingo. Pintura mural de San Francisco<br />
el alto (totonicapán). Foto de Rolando Rosito.<br />
premia la virtud y castiga el vicio; más el Dios que ellos<br />
adoran no es el Dios de los cristianos, sino el Sol a quien<br />
rinden todos sus juramentos [...] Creen en un principio<br />
malo, rival eterno de Dios, el cual llaman en su idioma<br />
Rahaual Vinaquil. En las graves calamidades le hacen<br />
sacrificios particulares […] Creen que las estrellas, y<br />
particularmente el planeta Venus, son seres animados a<br />
quienes llaman Santos [...] Los montes, los cerros, los<br />
barrancos, tienen en su concepto sus Dioses peculiares<br />
autores del bien y del mal que les sucede [...] Creen en la<br />
inmortalidad del alma, pero de una manera distinta,<br />
enteramente material.<br />
61 Estrada Monroy, 1972-II: 628-632.<br />
62 Cortés y Larraz, 1978-I: 87.<br />
63 Cortés y Larraz, 1978-I: 89.<br />
64 Cortés y Larraz, 1978-I: 49.<br />
Cuando entierran a sus muertos, si son hombres<br />
ponen sobre el cadáver todos los utensilios del viaje y de<br />
labranza y si mujeres los peculiares del sexo. Los<br />
oráculos, los sacerdotes de su culto que nosotros llamamos<br />
adivinos, y ellos en su idioma AH KIJ CHUCHC CAHAU.<br />
Estos gozan de mucha veneración debida a su<br />
charlatanería y al conocimiento de algunas hierbas<br />
venenosas y medicinales. Desde que el niño nace hasta<br />
que muere dirigen sobre él su religioso influjo. 61<br />
MatriMonio<br />
según los escritos de Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán,<br />
cronista criollo, Corregidor de Totonicapán y Alcalde mayor de<br />
sonsonate (El salvador); de Francisco Ximénez, fraile dominico<br />
y cura doctrinero de san Juan sacatepéquez, san Pedro las<br />
Huertas, santo Domingo Xenacoj, Chimaltenango y santo<br />
Tomás Chuilá (Chichicastenango); y del Arzobispo Pedro Cortés<br />
y Larraz, la colonización española provocó pocos cambios en lo<br />
que respecta a las costumbres ancestrales que los indígenas<br />
tenían sobre el matrimonio. Al referirse a la visita pastoral que<br />
hizo al curato de izalco (El salvador), Cortés y Larraz escribió:<br />
Es costumbre en estas, como en otras parroquias y en<br />
casi todas casar a los niños a los doce y catorce años. 62<br />
Estos casamientos no se hacen por elección de los<br />
muchachos, ni aun de sus padres, sino de los principales<br />
y calpules que mandan con despotismo; que tal muchacho<br />
se case con tal muchacha y como lo mande el calpul, no<br />
hay resistencia. 63<br />
Lo anteriormente señalado es en cuanto al matrimonio<br />
formal. sin embargo, entre las comunidades indígenas de<br />
finales del siglo Xviii era muy común encontrar familias cuyo<br />
origen había sido el rapto y en muchos casos producto de<br />
incestos entre primos, entre hermanos y aun entre padres,<br />
como lo constató en Petapa (Guatemala). 64<br />
El matrimonio no implicaba independencia, sino que la<br />
nueva pareja pasaba a depender de la familia del novio:<br />
mientras viven los padres y con este motivo los hijos,<br />
aunque casados, y los padres se consideran una misma<br />
familia, viven juntos en un mismo sitio de casa cerrado<br />
con árboles o con palos, de modo que si no son muchos