08.06.2013 Views

MEMORIAS DE LA ACADEMIA MEXICANA DE LA LENGUA

MEMORIAS DE LA ACADEMIA MEXICANA DE LA LENGUA

MEMORIAS DE LA ACADEMIA MEXICANA DE LA LENGUA

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

202 gustavo couttolenc<br />

la afonía de la diva al levantarse el telón<br />

el pastelero indigesto de pasteles<br />

más, más oxígeno por favor, para tanto intoxicado<br />

el hombre que creyó que el llanto no era masculino<br />

el humorista que explicaba demasiado sus chistes<br />

y el poeta antipoeta<br />

y el político inaugurando su propia estatua<br />

miss-universo de abuela<br />

el casto por impotencia y la señorita por fea<br />

y la esquela del millonario que pasó a mejor vida<br />

¿todavía mejor? 35<br />

Y en “El rascacielos” –¿quién podría mejor lograrlo?–, el poeta tilda<br />

esos ingenios de antiestéticos y engañosos:<br />

Con razón los terremotos<br />

comienzan talando estos dinosaurios<br />

por presumidos y feos<br />

rascar el cielo<br />

además del mal gusto, la mentira<br />

cualquier pájaro pone a las antenas sombrero de plumas<br />

y en abril dan conciertos, con batutas de nubes<br />

tristeza urbana de mirar los rascacielos iguales<br />

grandes por incapacidad de hacerlos bellos<br />

cajas de zapatos, ataúdes en pie<br />

gallineros sin la ternura de las gallinas<br />

si yo fuera terremoto empujaría el mar<br />

para azotarlos […] 36<br />

Por su parte, en “Exposición canina”, señala cómo en esta clase de<br />

actos no triunfa perro alguno, sino quien lo exhibe.<br />

Garabatos<br />

En el segundo apartado de Museo de cera, Peñalosa se dedica a pincelar<br />

“retratos”. He aquí algunos de ellos:<br />

35 Ibid., pp. 137-138.<br />

36 Ibid., p. 141.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!