PATRIMONIO ALIMENTARIO DE CHILE

PRODUCTOS SILVESTRES
LAHUE
ORIGEN
El lahue, lawu o lahui nao (Herbetia lahue) es el nombre
mapuche para una planta conocida también como flor de
la trinidad o cebolleta. Es nativa de Chile y Argentina y
está en peligro de extinción (Hoffmann, 1978). Los mapuches
consumían su raíz como una papa asada o cocida
(Lenz, 1910; Molina, 1810). “En tiempo de su sazón
traíamos también los frutos de los michayes […], además
la cebolleta del campo” (Mösbach, 1930). María Fresia
Antileo Cayulao, de Cañete, señala que el lahue “antes se
consumía mucho, pero ahora son muy escasos, muchos
terrenos están plantados con pinos y ahí no sale”.
DESCRIPCIÓN
El lahue es una pequeña planta herbácea bulbosa de
unos 25 cm. Las hojas son lanceoladas, su raíz es carnosa
y comestible, el tamaño del tubérculo es pequeño, de
1 cm, de un color café o negro y se encuentra enterrado
a unos 10 cm del suelo. Produce una flor de tres pétalos
de color azul entre noviembre y diciembre. Una vez que
produce las semillas, la planta se seca. Es una especie de
gran valor ornamental (Morales et al., 2009).
FORMA DE RECOLECCIÓN
Esta planta está presente en Chile desde la Región de
Valparaíso hasta Los Lagos (Hoffmann, 1978). Se desarrolla
en praderas de secano naturales o poco intervenidas.
María Fresia y su familia lo solían recolectar
en verano, en sitios abiertos, al borde del bosque nativo,
entre los meses de diciembre y febrero, cuando la
planta tiene flores, “ya que después se seca la flor y solo
queda la pequeña papita que no se ve”. Para recolectar
se usa un azadón u otra herramienta para picar y desenterrar
los lahue, labor que se hace con cuidado, “para
que no se confundan con la tierra”. Señala que ella saca
siempre solo los más grandes, para ir dejando para el
próximo año.
FORMAS DE CONSUMO
María Fresia indica que el tubérculo del lahue “se consume
porque es muy rico, tiene un agradable sabor
dulce, un gusto como a castaña”. Se puede consumir
crudo o cocido. Para esto, “se entierra en la ceniza en
el fogón por un par de minutos y luego está listo para
ser consumido”.
Foto de Edgardo Flores
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