PATRIMONIO ALIMENTARIO DE CHILE

PRODUCTO PREPARADO PATRIMONIAL | BEBIDAS
MUDAY DE QUINOA
MUDAY DE ARVEJA
Foto de Claudio Quiroz
Foto de Claudio Quiroz
Con respecto al consumo que los mapuches hacían de
muday (o chicha) de quinoa o kinwa, Molina (1810)
señala: “Con las semillas negras hacen una bebida
estomacal agradable”. Ana Ester Guirrimán, de ascendencia
mapuche-lafkenche, de Ponotro, Cañete,
indica que esta es una preparación muy antigua que
se preparaba en su familia.
Los ingredientes son: 1 kg de kinwa (de su huerta),
1 kg de miel, levadura, 1 brasa (trozo de carbón
o de leña encendido sin hacer llama), y 10 litros de
agua. La kinwa se lava con agua y se refriega con las
manos varias veces, hasta que deje de dar espuma y en
cada lavado se va cambiando el agua. “Se coloca en
una olla con agua y se deja cocer hasta antes de hervir.
Esto puede hacerse en el fogón o en la cocina a leña.
Después se retira del fuego y, recién ahí, se le pone el
resto de los ingredientes, miel, levadura y la brasa, y ya
está lista para ser consumida o esperar unos 2 a 3 días”.
Una vez que se enfría se traspasa al metawe, donde
permanecerá 2 a 3 días.
La chicha o muday de arveja, llamada por los mapuches
muday alfiza ( Jelves y Ñanco, s.f.), es una preparación
que realizaba la abuela de María Clementina
Pucol, de Pangueco, comuna de Cañete, pero indica
que “tal vez se comienza a perder, dado que si bien es
de gusto de los adultos, la gente prefiere las bebidas
que se compran”.
Los ingredientes para 1 ½ litro son: 1 kg de papas
con “pelo” (papas con cáscara), ½ kg de harina tostada,
½ kg de arvejas secas, 10 litros de agua. Se lavan las papas
con cáscara y se ponen a cocer en una olla con agua,
sin sal. Una vez que están cocidas, se les bota el agua de
la olla y se dejan enfriar. Después de eso, se saca la cáscara
a las papas y se ponen en otra olla con agua helada.
“El ½ kg de arvejas secas y limpias, se ponen en
la callana al fogón en el piso y se tuestan, moviendo la
callana al igual que se hace para tostar el trigo. También
se podría hacer en el horno de la cocina a gas,
pero es más difícil y hay que tener mucho cuidado que
no se quemen las arvejas. Cuando las arvejas están listas
se empiezan a deshollejar. Otra forma de saber que
están listas es cuando toman un color dorado. Se sacan
de la callana y cuando están frías, se pasan por el molino
para hacerlas harina y se dejan en un plato aparte.
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