10.04.2021 Views

EL VIENTO DE MIS VELAS--J J PICOS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Como no tenía su merced bastante con cinco

mandamientos, pues le planto los diez —me

contestó—. Y todo por venir galleando.

Habiéndome dejado la cara como las Tablas de

la Alianza, aquel Moisés enjuto y curtido,

coronado con cerdas aceradas, me miró de

arriba a abajo con tal mueca de desprecio que

quise disolverme en aquella celda como se

disuelve el cacao en la olla. Hoy, al recordar

mis pintas de entonces, aún siento la urgencia

de ponerme a silbar o a cantar en voz alta,

para que mi mente no fije el recuerdo de aquel

mamarracho ridículo, presuntuoso e

imprudente que era yo.

No vayan a pensar que, al donarme el autor

de mis días tan sonoro castigo, se habían

desperdiciado el moscatel y el cigarro. Porque

los piojosillos, avispados como ellos solos, le

echaron mano al vino antes de que el cristal

tocara el suelo. La pava del cigarro no puedo

decir quién la rescató, pero doy fe de que

anduvo en todas las bocas, y no porque la

parroquia se deshiciera en elogios sobre su

aroma y factura, sino porque se la fumaron

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!