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Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

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Partiendo de los desarrollos realizados en el trabajo anterior, “La interioridad<br />

de los medicamentos”, intentaremos comprender y defi nir en términos<br />

de fantasía específi ca la interioridad que constituye la estructura del opio,<br />

su “alma” y su “carácter”. Prosiguiendo este desarrollo procuraremos comprender<br />

el efecto de su “carácter” sobre el nuestro, la reacción de nuestra<br />

“interioridad” sobre la suya; la transformación de esa “doble” interioridad<br />

que, en el caso específi co del opio, incluye al letargo y a las fantasías hepáticas<br />

entre sus familiares más cercanos.<br />

Podemos decir que el opio –etimológicamente “jugo” (Krantz y Carr,<br />

1956)– es el látex, desecado, que mana de las heridas del órgano sexual<br />

“embarazado” de la planta llamada adormidera. Pardo, de color hepático<br />

(Revista Farmacéutica, 1890), y amargo como la hiel, contiene junto a un<br />

sustrato de sustancias vegetales farmacológicamente inertes, una familia<br />

de alcaloides presidida por la morfi na, cuya proporción predomina ampliamente<br />

sobre los demás. A pesar de que la morfi na deriva “ofi cialmente” del<br />

núcleo fenantrénico, noble antecesor de una cantidad de hormonas fi siológicas,<br />

lo específi co de su acción se halla vinculado a un anillo heterocíclico<br />

piperidínico, que denuncia su parentesco con su “prima hermana” la<br />

cicuta. Y ha de ser así, porque de acuerdo con lo que dicen los botánicos<br />

(Schmeil, 1933) acerca del fruto de otra de sus parientes, la Atropa belladona<br />

–solano furioso–, el animal que muerda el ánfora que contiene su<br />

simiente ha de huir víctima de un veneno repugnante de sabor amargo y<br />

nauseabundo. Pero el opio y la morfi na –que debe su nombre a Morfeo,<br />

dios del sueño– son los parientes nobles de una familia de envenenadores.<br />

Forman parte del láudano de Sydenham, quien dijo: “Yo no quisiera ser<br />

médico de no existir la morfi na”.

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