07.05.2013 Views

Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

OBRAS COMPLETAS TOMO III 179<br />

nidad o la herencia han varia do tan profundamente en los últimos años,<br />

que nos han llevado a romper con esta ilusión de seguridad y a reclasifi car<br />

la realidad del hombre enfermo en distintas categorías de la enfermedad.<br />

Lo importante es que hoy, muchísimo más que ayer, sentimos a estas categorías<br />

como provisorias, en lugar de experimentarlas como una realidad<br />

descubierta de una vez para siempre.<br />

En donde se hace más evidente esta necesidad de reclasi fi car continuamente,<br />

y desde diversos criterios, es en el estudio del hombre enfermo<br />

desde el terreno del psicoanálisis. Todas aquellas investigaciones “psicosomáticas”<br />

que restringen su ob jeto de estudio a una determinada enfermedad<br />

que ha sido se leccionada de acuerdo con un criterio de clasifi cación<br />

proveniente de la patología médica tradicional, quedan sometidas desde el<br />

comienzo a una mutilación que limita el campo de sus posibili dades.<br />

De acuerdo con el planteo realizado por Mitscherlich acerca de que el<br />

tipo de respuesta que brindamos a un problema depende del esquema dentro<br />

del cual se formula la pregunta, debemos pensar que el interrogar a la naturaleza<br />

del hombre enfermo con el instrumento psicoanalítico puede conducirnos<br />

a una nosografía diferente y particular para ese campo del conocimiento,<br />

trazada con los lineamientos propios de esta otra disciplina que interroga.<br />

De lo que hemos dicho anteriormente surge con claridad que resulta<br />

lícito y fructífero el investigar con el instrumento psi coanalítico, en búsqueda<br />

de condiciones necesarias (que tienen que ver con el sentido que<br />

posee la enfermedad como forma de conducta o de lenguaje), numerosas<br />

dolencias cuya “causa” se admite como perfectamente individualizada<br />

por la patología mé dica tradicional. Incluimos en este objetivo también a<br />

aquellas enfermedades que se llaman iatrógenas porque se atribuyen a la<br />

intervención inadecuada del médico.<br />

Nos referimos antes a la constitución de una patología tra zada con los<br />

lineamientos propios de la disciplina que interroga, en este caso el psicoanálisis.<br />

Aclaremos ahora una cuestión fun damental. Cuando investigamos<br />

desde el campo psicoanalítico la realidad del hombre enfermo, encontramos<br />

en los conocimientos acerca de la enfermedad que nos brinda la medicina<br />

clásica una importante vía de abordaje. Esto no puede extrañarnos si tenemos<br />

en cuenta que constituyen un sistema de representaciones concientes<br />

en la psiquis de un hombre, el médico, frente a la enfermedad de otro. Así<br />

como estudiamos en el paciente las fan tasías concientes e inconcientes<br />

que constituyen su imagen de la enfermedad, podemos encuadrar desde un<br />

ángulo semejante el conocimiento de la ciencia médica desarrollada por el<br />

hom bre, como un conjunto de derivados que, en cuanto constituyen transferencias<br />

preconcientes, de fantasías inconcientes especí fi cas, pueden ilu-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!