Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
OBRAS COMPLETAS TOMO III 259<br />
por su médico. El enfermo siente que este dolor “le quema” en la punta de<br />
los dedos pulgar, índice y medio, hacia los cuales se irradia. Disminuye<br />
únicamente cuando el paciente levanta la mano por encima de la cabeza<br />
con la palma hacia adelante y el codo hacia afuera.<br />
La radiografía de cuello muestra la posibilidad de un “pinzamiento” de las<br />
raíces que transcurren entre las vértebras quinta, sexta y séptima. Los tres dedos<br />
afectados corresponden al territorio inervado por el mediano, cuyas fi bras<br />
atraviesan la columna cervical en la zona señalada. El dolor, urente, muy intenso,<br />
aumenta. A partir de esta situación, y en unos pocos días, se agotan, uno<br />
tras otro, los sucesivos recursos terapéuticos: analgésicos, antiinfl amatorios,<br />
miorrelajantes, sedantes, calor local, reposo, collar inmovilizador del cuello.<br />
El dolor no cede y el enfermo se desespera. Una inyección local, realizada con<br />
fi nes paliativos sobre el plexo braquial derecho, se demuestra efectiva en la<br />
anestesia de la mano. Sin embargo, el alivio es incompleto. Por esta razón, el<br />
traumatólogo, frente a algunos comentarios de la familia del paciente, decide<br />
solicitar una consulta con un colega que posea formación psicoanalítica.<br />
Si repasamos lo que llevamos dicho hasta aquí, vemos que, habiendo llegado<br />
a este punto, tenemos una explicación lógica de los síntomas como efectos<br />
que derivan de una causa 52 . Suponemos que una compresión mecánica<br />
(acerca de cuyo origen no nos preguntamos ahora) produce la excitación de un<br />
nervio. Esta excitación es experimentada como dolor porque se realiza sobre<br />
las fi bras nerviosas que transmiten específi camente esa sensación. El conjunto<br />
de los síntomas corresponde además al territorio inervado por el mediano, que<br />
presumimos comprometido. La existencia de esta compresión puede también<br />
explicar la disminución del dolor en la posición anteriormente mencionada.<br />
Pero el enfermo, además de “poseer” un cuerpo que funciona como un<br />
delicado mecanismo de relojería, es un hombre que vive una existencia carga-<br />
52 Es pertinente considerar aquí lo que Bateson (1979) señala –aclaremos previamente,<br />
a los fi nes de poder traducir bien, que utiliza la expresión “mapping onto”, que<br />
signifi ca en su terminología trazar un mapa de un territorio “sobre” un determinado<br />
“material” que impone leyes también determinadas al código de transformación<br />
territorio-mapa–: “...una explicación en el trazado de un mapa, acerca de los<br />
elementos o piezas de una descripción, adecuado a las condiciones de una determinada<br />
tautología, y la explicación deviene aceptable en el grado en que se esté deseando<br />
aceptar, y se esté capacitado para aceptar, los vínculos de (o las relaciones internas<br />
que conforman) una tautología” –Bateson usa aquí la palabra “tautología” para<br />
referirse a algo muy similar a lo que Ortega y Gasset (1940) denomina “creencia”–.<br />
Agreguemos por fi n que dado que la idea de la relación causa-efecto lleva implícita<br />
una idea de tiempo que se halla ausente en el sistema de relaciones lógicas, para<br />
Bateson la lógica es un modelo incompleto y pobre de la causalidad.