Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
48 LUIS CHIOZZA<br />
3. Exposición del tema a través de dos pacientes<br />
Un comentario acerca de dos pacientes que llamaremos A y B puede<br />
ayudarnos a aclarar parte de lo expuesto hasta aquí 10 .<br />
La señora A, de 30 años de edad, contaba entre sus antecedentes trastornos<br />
hepáticos y cólicos atribuidos a su vesícula biliar. Hacía frecuentes referencias,<br />
en el material manifi esto, a malestares hepáticos propios y ajenos.<br />
En un tratamiento psicoterapéutico anterior había manifestado una conducta<br />
francamente psicopática a través de un acting out bastante serio en ocasión<br />
de las vacaciones de su psicoterapeuta. Ya en las primeras semanas de tratamiento<br />
aparecieron como contenidos subyacentes hastío, fastidio y aburrimiento,<br />
vinculados a una angustia intensa y a fantasías de muerte.<br />
Transcurridos seis meses de tratamiento, en una de las sesiones me manifestó<br />
que mis interpretaciones eran recibidas en ese momento como algo<br />
muy gratifi cante, que la enriquecía aliviándola y le permitía comprender,<br />
mejor que nunca, el sentido del tratamiento psicoanalítico. La sesión posterior<br />
a ésta había sido suspendida previamente por tratarse de un día feriado.<br />
En la sesión siguiente me demoré cinco minutos en atenderla y entró pálida<br />
de rabia, me expresó, con una violencia que yo no le conocía, que estuvo a<br />
punto de mandarme “a la mierda” e irse dejándome plantado, y que no podía<br />
aguantar esperando mientras yo estaba con otra persona, “un boludo”, ocupando<br />
su hora. Me dijo además que se había levantado de la cama para venir<br />
a verme, que había estado enferma con una colecistitis, cólicos y fi ebre, que<br />
su vesícula se veía “a fl or de piel” y que el médico le había prescripto tres<br />
días de cama por miedo de que le sobreviniera una ictericia.<br />
En mi contratransferencia predominaban los sentimientos de culpa<br />
que me invadían de una manera sorpresiva y me dejaban paralizado. Luego<br />
de esa sesión y la siguiente, en las cuales quizás lo básico en mis interpretaciones<br />
consistió en hacerle conciente cómo me atacaba intentando<br />
llenarme de culpa y cómo mi interpretación era vivida como un contrarreproche,<br />
desapareció la expresión corporal de sus trastornos y aparecieron<br />
nuevamente, y con mayor intensidad en la transferencia y en la contratransferencia,<br />
el fastidio, el aburrimiento y el letargo.<br />
10 {Los dos casos que se presentan, señoras A y B, han sido incluidos en “Dos ejemplos<br />
extraídos de la práctica analítica”, tercer apartado del capítulo I de Psicoanálisis de<br />
los trastornos hepáticos (<strong>Chiozza</strong>, 1970a), OC, t. I. Asimismo, sobre la señora A<br />
se expone en el artículo anterior en este tomo, y la señora B es la paciente llamada<br />
Mary, cuyo caso se relata en Cuando la envidia es esperanza (<strong>Chiozza</strong>, 1998a<br />
[1963-1984]). Para una lectura completa del historial, véase OC, t. II.}