You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
SIGMUND FREUD<br />
____________________________________________________________________________________<br />
varios fragmentos principales o, en general, <strong>de</strong> aquel<strong>los</strong> que pertenecen a una misma noche,<br />
no <strong>de</strong>bemos olvidar tampoco la posibilidad <strong>de</strong> que tales <strong>sueños</strong> sucesivos y diferentes<br />
posean la misma significación y expresen <strong>los</strong> mismos sentimientos por medio <strong>de</strong> un distinto<br />
material. El primero <strong>de</strong> tales <strong>sueños</strong> homólogos suele ser entonces, muy frecuentemente, el<br />
más <strong>de</strong>formado y tímido, y el segundo se muestra más atrevido y claro. Ya el sueño bíblico<br />
<strong>de</strong> las espigas y las vacas, soñado por el faraón e interpretado por José, perteneció a esta<br />
clase. Josefo la expone más <strong>de</strong>talladamente que en la Biblia (Antigüeda<strong>de</strong>s judías, tomo II,<br />
caps. 5 y 6). Después <strong>de</strong> relatar el primer sueño, dice el rey: «A continuación <strong>de</strong> este primer<br />
sueño <strong>de</strong>sperté intranquilo y medité qué es lo que podía significar, pero luego volví a<br />
quedarme dormido y tuve otro sueño mucho más extraño, que me produjo aún más espanto<br />
y confusión.» Al terminar <strong>de</strong> escuchar el relato <strong>de</strong>l faraón dice José: «Tu sueño, ¡oh rey !<br />
es, en apariencia, doble, pero sus dos visiones poseen una misma significación.»<br />
En su Beitrag zur Psychologie <strong>de</strong>s Geruechtes, refiere Jung cómo un disfrazado<br />
sueño erótico <strong>de</strong> una colegiala fue comprendido y reproducido en diversas variantes por sus<br />
compañeras sin necesidad <strong>de</strong> <strong>interpretación</strong> ninguna, y observa, con relación a estos relatos<br />
<strong>de</strong> sueño, «que el pensamiento final <strong>de</strong> una larga serie <strong>de</strong> imágenes oníricas contiene<br />
exactamente aquello mismo que ya se intentó representar en la primera imagen <strong>de</strong> la serie.<br />
<strong>La</strong> censura rechaza el complejo durante el mayor tiempo posible por medio <strong>de</strong><br />
encubrimientos simbólicos, <strong>de</strong>splazamientos, transformaciones en materia inocente, etc.,<br />
renovados <strong>de</strong> continuo» lugar (cit., pág. 434). Scherner conoció perfectamente esta<br />
peculiaridad <strong>de</strong> la representación onírica y la <strong>de</strong>scribe, al <strong>de</strong>sarrollar su teoría <strong>de</strong> <strong>los</strong><br />
estímu<strong>los</strong> orgánicos, como una ley especial (pág. 399): «Por último, observa la fantasía en<br />
todas las formaciones oníricas emanadas <strong>de</strong> <strong>de</strong>terminados estímu<strong>los</strong> nerviosos la ley<br />
general <strong>de</strong> no pintar al principio <strong>de</strong>l sueño sino las más lejanas y libres alusiones al objeto<br />
estimulante y, en cambio, al final, cuando se agota el material pictórico, representa clara y<br />
<strong>de</strong>snudamente el estímulo mismo o, correlativamente, el órgano que a él correspon<strong>de</strong> o su<br />
función, con lo cual acaba el sueño revelando por sí mismo su motivo orgánico...» En su<br />
trabajo un sueño que se interpreta a sí mismo, nos da Otto Rank una amplia confirmación<br />
<strong>de</strong> esta ley <strong>de</strong> Scherner. El sueño que en él nos comunica se compuso <strong>de</strong> dos fragmentos<br />
oníricos soñados una misma noche por una muchacha y terminado el segundo con un<br />
orgasmo. Este último permitió una <strong>de</strong>talladísima <strong>interpretación</strong> <strong>de</strong>l sueño total sin recurrir<br />
para nada a la ayuda <strong>de</strong> la sujeto, y la abundancia <strong>de</strong> relaciones entre dos contenidos <strong>de</strong><br />
ambos fragmentos oníricos mostró que el primero expresaba, aunque más tímidamente, lo<br />
mismo que el segundo, <strong>de</strong> manera que éste, el <strong>de</strong> la polución, contribuyó al total<br />
esclarecimiento <strong>de</strong>l primero. Muy justificativamente ha tomado Rank este caso como punto<br />
<strong>de</strong> partida para el estudio <strong>de</strong> la significación <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>sueños</strong> <strong>de</strong> polución con respecto a la<br />
teoría <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>sueños</strong> en general.<br />
Mi experiencia personal me ha <strong>de</strong>mostrado, sin embargo, que no siempre nos<br />
llegamos a hallar en situación <strong>de</strong> interpretar la claridad o confusión <strong>de</strong> <strong>los</strong> <strong>sueños</strong> como<br />
seguridad o duda en el material onírico. Más a<strong>de</strong>lante habremos <strong>de</strong> señalar, en la<br />
elaboración onírica, el factor, no mencionado hasta ahora, <strong>de</strong> cuya actuación <strong>de</strong>pen<strong>de</strong><br />
especialmente esta escala <strong>de</strong> cualida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l sueño. Algunos <strong>sueños</strong>, en <strong>los</strong> que se mantiene<br />
durante cierto tiempo una <strong>de</strong>terminada situación o <strong>de</strong>coración, aparecen cortados por<br />
interrupciones que son <strong>de</strong>scritas en su relato con las palabras siguientes: «Parece luego<br />
201