Charlotte Brontë Jane Eyre I - Rincon-Spanish
Charlotte Brontë Jane Eyre I - Rincon-Spanish
Charlotte Brontë Jane Eyre I - Rincon-Spanish
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
-Entonces, ¿por qué se pasa la vida mirándote y paseando a solas contigo? Mary y<br />
yo suponíamos que iba a proponerte...<br />
-En efecto; me ha pedido que fuera su mujer. -¡Lo que suponía! -exclamó Diana,<br />
juntando las manos-. ¿Te casarás con él, <strong>Jane</strong>? ¡Así se quedará en Inglaterra!<br />
-No, Diana. Casándose conmigo, lo haría para llevar a la India una colaboradora<br />
eficaz.<br />
-¡Cómo! ¿Pretende que le acompañes a la India? -Sí.<br />
-¡Está loco! No vivirías allí ni tres meses. No lo hagas. No consientas. ¿Qué le has<br />
dicho, <strong>Jane</strong>?<br />
-Me he negado a casarme con él. -¿Se ha disgustado?<br />
-Sí; no me lo perdonará nunca, aunque le he ofrecido acompañarle como pudiera<br />
hacerlo una hermana. -Sería una locura. La tarea es fatigosa y tú débil. John pide<br />
imposibles, y no dejaría de exigírtelos allí. Desgraciadamente, según he notado, eres<br />
incapaz de negarte a nada que él te pida. Me maravilla que hayas tenido valor para<br />
rehusar. ¿No le quieres, <strong>Jane</strong>? -Para marido, no.<br />
-Es un buen mozo, sin embargo.<br />
-Y yo soy fea, ya lo ves. No haríamos buena pareja. -¿Fea? ¡Al contrario! Eres<br />
muy bonita, demasiado para encerrarte en Calculta.<br />
E insistió en que desechase todo pensamiento de acompañar a su hermano.<br />
-Así será -dije-, porque cuando le he expresado mi deseo de servirle de auxiliar ha<br />
manifestado su disgusto por lo que considera una falta de decoro. Cree que le propongo<br />
una cosa incorrecta ofreciéndome a seguirle sin casarnos. ¡Como si yo no le hubiese<br />
considerado siempre como un hermano!<br />
-¿Por qué dices que no te quiere?<br />
-Me gustaría que él mismo te lo explicara. Asegura que no desea una compañera<br />
para su satisfacción, sino para el servicios de la obra a que se consagra. Afirma que yo<br />
estoy hecha para la labor y no para el amor, lo que sin duda es verdad. Pero en mi<br />
opinión, si no estoy hecha para el amor, no lo estoy tampoco para el matrimonio. ¿No<br />
sería una extravagancia, Diana, encadenarse de por vida a un hombre que sólo la<br />
considera a una como un instrumento útil?<br />
-Sería insoportable, absurdo, fuera de lugar.<br />
-No obstante -continué-, si me casara con él admito la posibilidad de amarle de un<br />
modo especial y torturador, porque es' inteligente y a veces en su aspecto, maneras y<br />
palabras hay cierta grandeza heroica. Y en tal caso, yo sería indeciblemente desdichada.<br />
No desea que le ame y si le demostrara algún sentimiento, me diría que era una cosa<br />
superflua, innecesaria para él e inoportuna en mí. Me consta.<br />
-¡Y el caso es que John es bueno! -dijo Diana. -Bueno y elevado, pero indiferente a<br />
los derechos y los sentimientos de las gentes pequeñas cuando se trata de alcanzar sus<br />
vastas miras. Pero los insignificantes, es mejor no mezclarnos en su camino... Mira: ahí<br />
viene. Te dejo, Diana.<br />
<strong>Brontë</strong>, <strong>Charlotte</strong>: <strong>Jane</strong> <strong>Eyre</strong><br />
262