Orientaciones para el Desarrollo Curricular

Esto permite inducir, tomando las experiencias personales como punto de partida,
la concordancia entre pronombres personales, género y número en la expresión tanto
oral como escrita.
Actividad 3: Mi lectura favorita
Lea a los niños y niñas una fábulas, historia o cuento que les motive a realizar
descripciones.
Ejemplo:
“Había una vez una niña llamada Ixchel que vivía en el campo, su casa era muy
linda. Le gustaban los días de verano ya que habían días hermosos y desde temprano
la despertaban los pajaritos y las aves de corral. Sin embargo, Ixchel tenía ¡una pena
muy grande¡, había una familia de ratones que se estaba comiendo el maíz de la
cosecha; por lo que dispuso platicar con los ratones para pedirles que no se comieran
el maíz.
Una mañana se levantaron papá ratón y mamá ratona y vieron un pedazo de sabroso
queso blanco. Pidieron a Ixchel que les regalara un pedacito. Ixchel, como es una
niña buena, caritativa y bondadosa y, para que ya nos se comieran el maíz, les regaló
una tajada del queso.
Los ratones corrieron a comérselo y comentaron: “ -Este queso está delicioso, está
suave y fresco. “
Al oírlos salieron sus tres hijos: Prudente, Atrevido y Distraído y les pidieron un
pedacito. Pero, se quedaron con ganas de comer más. En eso, vieron que había más
queso en la mesa de la cocina. Entonces Atrevido, Prudente y Distraído pensaron
qué hacer para comérselo.
Atrevido pensó en correr para llevárselo, pero Ixchel lo vio y no pudo.
Distraído dispuso ir por la noche a traerlo, pero no pudo porque se quedo dormido.
El ratoncito Prudente pensó cómo poder llevarse el queso que sus hermanos no
habían podido obtener. En eso se recordó que en el invierno pasado se había
derrumbado la casa de las hormigas y él les había dado posada en su cuevita. Se
fue a platicar con el jefe de las hormigas y le pidió que le ayudaran a sacar el queso
de la mesa. Gustosas las hormigas colaboraron con el ratoncito Prudente.
Al ver esto Ixchel les dijo que no había necesidad
de hacer eso, que si tenían hambre podían pedir el
queso y ella se los hubiera dado. A partir de entonces
los ratoncitos, muy avergonzados, dejaron la
casa y se fueron a vivir al bosque.
Es por esto que Ixchel no volvió a
ver a los ratones en su casa. “
Al terminar la lectura, haga una lluvia de ideas para que los niños y las niñas le
pongan el nombre de la historia a que enumeren los personajes que intervienen, a
que identifiquen el problema, las acciones que realizaron los diferentes personajes
y a que descubran cómo se resolvió el problema.
bloque 4- página 212