31.05.2013 Views

1365539256995

1365539256995

1365539256995

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—¿Y Steve? —preguntó Claire.<br />

—Ya se han ido todos —respondió Georgia quitándole importancia—. Oh, mira, aquí está<br />

Trinny.<br />

Y se escabulló mientras Claire continuaba despidiéndose de la gente. Nate y Sarah fueron<br />

de los últimos en marcharse.<br />

—Gracias por esta velada maravillosa —dijo Sarah al besar a Claire en la mejilla—. Nos<br />

vemos.<br />

—Claro.<br />

—Nos vemos —repitió Nate—. Pronto, espero. Te llamaré.<br />

Claire asintió imperceptiblemente.<br />

—¿Os vais? —De repente Georgia se apresuró hacia ellos—. Gracias por venir, Nate y<br />

Sarah. Y gracias por llevarme hoy a Tesco, Nate. Las antorchas han estado súper bien.<br />

—Lo he hecho encantado —dijo Nate.<br />

—Me gusta cómo me hablas —comentó Georgia entre risas—. Como si fuera una adulta de<br />

verdad, ¿a que sí, mamá?<br />

—Yo también te trato como a una adulta —replicó Claire tensa—. Pero ya está bien, seguro<br />

que Nate y Sarah quieren irse. Es tarde.<br />

—Por lo menos mañana podemos dormir hasta tarde —comentó Sarah—. Yo no soy nada<br />

madrugadora.<br />

—Mi madre tampoco —les informó Georgia—, pero solía fingirlo por mi padre.<br />

—Cállate, Georgey—espetó Claire—. Sarah y Nate no necesitan saberlo todo sobre<br />

nosotras.<br />

—Pero les interesa —dijo Georgia, y miró a Nate—. ¿O no?<br />

—Mucho. —Nate le devolvió una amplia sonrisa.<br />

—Buena noches. —Claire le extendió la mano. Él la miró divertido y se la estrechó. La mano<br />

de Nate estaba caliente y seca.<br />

—Te llamaré —repitió él.<br />

La tenue luz de la mesita de noche de Saffy brillaba con suavidad. La pequeña estaba<br />

durmiendo con los brazos abiertos ocupando todo lo ancho de la cama; tenía los dos brazos y<br />

una pierna fuera de la manta azul y rosa. Su cara quedaba en la sombra, pero Eavan podía ver<br />

sus oscuras pestañas sobre sus mejillas ligeramente coloradas. Saffy estaba dormida cuando<br />

Eavan llegó a casa, así que Candida le dijo que no se molestara en llevarla en coche a casa,<br />

que se iría paseando. La canguro no comentó nada sobre la ausencia de Glenn, y a Eavan no<br />

se le ocurrió nada sensato que decir, así que le dijo sin más que Glenn también había decidido<br />

volver paseando.<br />

—Hace bueno —había respondido Candida alegremente—. Es agradable estar al aire libre.<br />

Apuesto a que la barbacoa ha ido estupenda.<br />

Después, Candida se fue a su casa y Eavan dio una vuelta por el piso de abajo recogiendo<br />

cosas que ya estaban ordenadas y ahuecando cojines; luego vació el lavavajillas, una tarea<br />

que detestaba.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!