26.05.2020 Views

el siglo sovietico

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

El propio instituto de estudios del Gosplan, una buena institución

interdisciplinaria, era perfectamente capaz de estudiar y predecir situaciones

complejas, y conocía bien el sistema de planificación. Su intención era

entender el presente para prepararse para el futuro inmediato.

Intelectualmente, sus investigadores estaban mejor formados que otros

planificadores y políticos para desentrañar una constelación socioeconómica

complicada, y anunciaron la posibilidad de problemas en un futuro. En

febrero de 1965, a petición de la cúpula del Gosplan, presentaron un informe

sobre la cuestión de las existencias de mano de obra y la demografía. El

responsable del instituto, Yefimov, ya había alzado la voz en el pasado y había

alimentado el fervor de los reformistas económicos. Sin embargo, estos

informes solían ser criticados por otros planificadores y funcionarios en textos

inéditos y de uso interno. En un año marcado ya por un debate encendido,

Yefimov, partidario posiblemente de Kosigin, elaboró un estudio ambicioso

sobre la industria soviética, con argumentos de peso a favor del cambio y con

una visión detallada de los mecanismos que intervenían en la compleja misión

de gestionar las existencias de mano de obra [2] . Yefimov abordó los

problemas con los que se había topado en la capital y en las regiones sin

ocultar las tensiones existentes, y propuso diferentes soluciones, algunas

formuladas con claridad, otras simplemente esbozadas, para atajarlos. Desde

un punto de vista empírico y analítico, el texto es de una gran riqueza, y hace

un buen diagnóstico y lanza una advertencia acerca de las consecuencias

funestas que cabía esperar de no producirse las reformas.

He aquí el cuadro que pintó Yefimov. De entrada, llamó la atención sobre

el creciente desequilibrio entre la mano de obra disponible y el uso que se le

daba. Entre 1959 y 1963, la población activa había crecido en 9 millones de

personas, mientras que los suministros de mano de obra sólo lo habían hecho

en 1,7 millones. En otras palabras, la mayor parte de la mano de obra

necesaria era gente que trabajaba en casa o que labraba sus pequeñas parcelas.

Así se había cubierto el 81 por 100 que faltaba, es decir, unos 7,3 millones de

trabajadores. Sin embargo, la cifra de los que trabajaban en casa seguía

cayendo, y esta fuente no tardaría en agotarse.

El panorama nacional muestra áreas en las que había escasez de mano de

obra, pero también otras con un excedente de trabajadores. En Asia Central, el

crecimiento demográfico natural había pasado del 27 al 33 por 100 en los

últimos años, doblando así la media soviética. De 1959 a 1963, el número de

personas que trabajaban en la economía dirigida por el Estado o que aún

estudiaban había crecido a un ritmo de entre el 2,2 y el 4,4 por 100, y el

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!