16.02.2017 Views

De amor y de muerte

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

la arrulló consolándola un poco. Mucho <strong>de</strong>spués, cuando estuvo más serena, Francisco<br />

<strong>de</strong>cidió terminar su trabajo.<br />

--Espérame aquí. Vuelvo a la mina por unos minutos, ¿pue<strong>de</strong>s quedarte sola?<br />

La joven asintió en silencio y recogiendo las piernas como un niño hundió la cara entre las<br />

rodillas, procurando no pensar, no oír, no ver, ni siquiera respirar, suspendida en la mayor<br />

angustia, mientras él regresaba a la sepultura llevando la cámara fotográfica y el pañuelo<br />

atado en la cara.<br />

Francisco acabó <strong>de</strong> quitar piedras y remover la tierra, hasta <strong>de</strong>scubrir el cuerpo completo<br />

<strong>de</strong> Evangelina Ranquileo Sánchez. La reconoció por el claro tono <strong>de</strong> su pelo. Un poncho<br />

la envolvía a medias, iba <strong>de</strong>scalza y vestía algo similar a una enagua o una camisa <strong>de</strong><br />

dormir. Se encontraba en tal estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>terioro, pudriéndose en caldos don<strong>de</strong> los<br />

gusanos se nutrían, fermentando en su propia <strong>de</strong>solación, que él <strong>de</strong>bió recurrir a un<br />

portentoso esfuerzo para controlar las náuseas y seguir a<strong>de</strong>lante. No era hombre <strong>de</strong><br />

per<strong>de</strong>r el control con facilidad, había hecho prácticas profesionales con cadáveres y podía<br />

dominar su estómago, pero hasta entonces nunca estuvo frente a un espectáculo<br />

semejante. La sordi<strong>de</strong>z <strong>de</strong>l entorno, la penetrante feti<strong>de</strong>z y el temor acumulado<br />

contribuían a <strong>de</strong>scomponerlo. No podía respirar. A toda prisa tomó varias fotografías sin<br />

ocuparse <strong>de</strong>l encuadre ni medir la distancia, apurado porque en cada chispazo <strong>de</strong> luz<br />

blanca iluminando la escena, una arcada se atravesaba en su garganta. Se apresuró en<br />

terminar lo antes posible y escapó <strong>de</strong> ese sepulcro.<br />

Al aire libre soltó la máquina y la linterna y se <strong>de</strong>jó caer por tierra <strong>de</strong> rodillas, con la<br />

cabeza gacha, procurando relajarse y controlar las sacudidas <strong>de</strong> su estómago. Tenía el<br />

olor adherido a su piel como una peste y trabada en su retina la imagen <strong>de</strong> Evangelina<br />

cocinándose en su última consternación.<br />

Irene tuvo que ayudarlo a ponerse <strong>de</strong> pie.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!