- Page 1 and 2: De amor y de sombra Isabel Allende
- Page 3: la viuda más rica del reino. Solo
- Page 7 and 8: --Usted anda con la cara en gloria
- Page 9 and 10: --Cúrala-- rogaba esa mañana mien
- Page 11 and 12: nieta de campesinos, Digna era prud
- Page 13 and 14: trámite le inyectó un líquido en
- Page 15 and 16: Cuando los niños empezaban a camin
- Page 17 and 18: hombre, con mayor razón debía ser
- Page 19 and 20: --Su padre. --¡Basta, por favor! -
- Page 21 and 22: Entonces, para disimular, hizo el j
- Page 23 and 24: Mucho tiempo atrás, en una pequeñ
- Page 25 and 26: provisoriamente con la que tenían
- Page 27 and 28: porque no se había fijado aún la
- Page 29 and 30: de sus giras circenses, la venta de
- Page 31 and 32: Dentro de la vivienda Evangelina pe
- Page 33 and 34: tantas penurias, trabajos y afanes
- Page 35 and 36: Esa noche nadie se encontraba en la
- Page 37 and 38: Sus amigas le recomendaron cursos d
- Page 39 and 40: quisieron saber más de él. Eusebi
- Page 41 and 42: Cuando Francisco Leal llamó a la p
- Page 43 and 44: por obra de magia. Los planos del e
- Page 45 and 46: cartero. Le tendió una mano peque
- Page 47 and 48: liberacionistas en sus campañas de
- Page 49 and 50: aceptar el hecho sin hacer pregunta
- Page 51 and 52: Don Simón le entregó un puñado d
- Page 53 and 54: iniciativa de enterrar las píldora
- Page 55 and 56:
Digna le dio las razones tantas vec
- Page 57 and 58:
esas desgracias solían ocurrir a q
- Page 59 and 60:
más compañía que los pingüinos
- Page 61 and 62:
sola ventana en toda la construcci
- Page 63 and 64:
Hipólito Ranquileo demoró un larg
- Page 65 and 66:
elementos un profundo sentido esté
- Page 67 and 68:
--¡Vuélvete!--le ordenaron. El of
- Page 69 and 70:
-¿Por qué me tutea? ¿Y en primer
- Page 71 and 72:
el oficial recordó las fotografía
- Page 74 and 75:
Segunda Parte LAS SOMBRAS La tierra
- Page 76 and 77:
y salir eran sometidos a una revisi
- Page 78 and 79:
Ella buscó en lo más profundo de
- Page 80 and 81:
pómulos de una hermosa modelo, a M
- Page 82 and 83:
Francisco Leal también estaba hart
- Page 84 and 85:
todos la acompañaron celebrando su
- Page 86 and 87:
Hilda toda suerte de cuidados. Era
- Page 88 and 89:
enunciar a sus ideales de justicia
- Page 90 and 91:
partía a trotar al parque, mientra
- Page 92 and 93:
altanero que de partida establecía
- Page 94 and 95:
Para Gustavo Morante el Ejército e
- Page 96 and 97:
deleitarse en su propia tristeza. U
- Page 98 and 99:
la tensión y la ansiedad, pero dis
- Page 100 and 101:
quedarse hasta el final. A eso hab
- Page 102 and 103:
--Desde entonces nada sabemos de la
- Page 104 and 105:
humillaciones, dijo, toda su vida g
- Page 106 and 107:
Francisco no retrocedía en el mome
- Page 108 and 109:
cualquier motor. Era una bestia sin
- Page 110 and 111:
movió, conmovido por una emoción
- Page 112 and 113:
Francisco se remontó a los recuerd
- Page 114 and 115:
isueños. Ignoraba que vivían el d
- Page 116 and 117:
El Profesor comprendió. La conocí
- Page 118 and 119:
superioridad de clase social de la
- Page 120 and 121:
--¿Es siempre tan atolondrado su T
- Page 122 and 123:
agonizante, deteniéndose en Fausti
- Page 124 and 125:
Quedaron frente a frente el Tenient
- Page 126 and 127:
La muchacha llevaba el cabello reco
- Page 128 and 129:
--Una vez Cleo atrapó la estola y
- Page 130 and 131:
llegó a través de cincuenta años
- Page 132 and 133:
a su hija dormida y se retiraba tra
- Page 134 and 135:
cuello abierto en largo tajo; ratas
- Page 136 and 137:
las primaveras, cuando aparecían s
- Page 138 and 139:
Ese fue el comienzo de un negocio q
- Page 140 and 141:
Sentía miedo por las noches, cuand
- Page 142 and 143:
adivinar el largo trayecto que lo c
- Page 144 and 145:
despensa una bolsa de provisiones p
- Page 146 and 147:
El Sargento Faustino Rivera escribi
- Page 148 and 149:
cerro de donde surgieron de pronto
- Page 150 and 151:
imaginar a su amigo traficando con
- Page 152 and 153:
prostitutas demasiado pronto, porqu
- Page 154 and 155:
criatura, tenía la actitud inequí
- Page 156 and 157:
metido en una camisa de fuerza. Los
- Page 158 and 159:
la noche y la ausencia temporal del
- Page 160 and 161:
--Es suficiente por hoy. Volveré d
- Page 162 and 163:
La proximidad de Michel excitaba a
- Page 164 and 165:
automóviles japoneses tan delicado
- Page 166 and 167:
huesos y ni siquiera la tibieza de
- Page 169 and 170:
Tercera Parte DULCE PATRIA Yo viajo
- Page 171 and 172:
tranquilizó, porque no vieron rast
- Page 173 and 174:
Francisco pasó a través del aguje
- Page 175 and 176:
la arrulló consolándola un poco.
- Page 177 and 178:
precioso en que la tenía para él,
- Page 179 and 180:
Mucho después, cuando sintió vibr
- Page 181 and 182:
También Irene y Francisco sospecha
- Page 183 and 184:
en la piel. Trepó los últimos met
- Page 185 and 186:
en busca del hijo perdido. Durante
- Page 187 and 188:
Durante el viaje en tren de vuelta
- Page 189 and 190:
La educación de los militares, des
- Page 191 and 192:
Por estar unidos en la complicidad
- Page 193 and 194:
atinara a pasar. Por fortuna Irene
- Page 195 and 196:
--¡Virgen Santísima! --fue lo ún
- Page 197 and 198:
seguían con vida. El sol se escond
- Page 199 and 200:
--¡Caramba! ¿Tienes que meterte e
- Page 201 and 202:
Francisco encontró a su hermano li
- Page 203 and 204:
emplazar la justicia por caridad, d
- Page 205 and 206:
por instrucciones precisas de evita
- Page 207 and 208:
abogados eran observados a la dista
- Page 209 and 210:
Señor Presidente: Días atrás una
- Page 211 and 212:
Trazaron un círculo de hierro, cas
- Page 213 and 214:
--¿Y qué hacemos con la opinión
- Page 215 and 216:
provocada por la primavera. Tranqui
- Page 217 and 218:
--No hay mal que por bien no venga,
- Page 219 and 220:
saludo. Se jactaba de ser hombre ob
- Page 221 and 222:
Y entonces el hombre, como si hubie
- Page 223 and 224:
uta mala, sin pavimento y llena de
- Page 225 and 226:
Irene pagó la cuenta, con disimulo
- Page 227 and 228:
Sentada en un taburete de mimbre, E
- Page 229 and 230:
partieron por diversos caminos en b
- Page 231 and 232:
noche más larga de su existencia.
- Page 233 and 234:
deseándola, amándola, recordando
- Page 235 and 236:
llevaron su grabadora, sus apuntes,
- Page 237 and 238:
--No la dejen sola, porque vendrán
- Page 239 and 240:
Fue inútil explicarle que la causa
- Page 241 and 242:
Era feliz. Se amancebó con una muc
- Page 243 and 244:
encontrada en poder de Antonio Flor
- Page 245 and 246:
horquillas de hueso y carey. Estaba
- Page 247 and 248:
pues ya no tenía amor y nadie la n
- Page 249 and 250:
--¿Puedes caminar, Irene?--pregunt
- Page 251 and 252:
tiempos. La imagen esbelta enfundad
- Page 253 and 254:
--Puede retirarse, ciudadana. Perma
- Page 255 and 256:
--Una semana hasta que pueda camina
- Page 257 and 258:
--¡Sueñas, hijo! Aunque haya mili
- Page 259 and 260:
El Profesor llevó aparte a Francis
- Page 261 and 262:
Francisco Leal nunca se ocupó de l
- Page 263 and 264:
Hicieron el camino en dos etapas, p
- Page 265 and 266:
Sólo los controles policiales en l
- Page 267 and 268:
--Lo único malo es que no estamos
- Page 269 and 270:
evaporándose en el techo de su cas