16.02.2017 Views

De amor y de muerte

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

en busca <strong>de</strong>l hijo perdido. Durante días recorrió los sen<strong>de</strong>ros <strong>de</strong> los burros, indagando a<br />

cada sombra que cruzó en su camino y mientras marchaba <strong>de</strong> al<strong>de</strong>a en al<strong>de</strong>a, <strong>de</strong> cerro<br />

en cerro, acumulaba furia y hacía planes para propinar al muchacho la única paliza <strong>de</strong> su<br />

vida. Por fin alguien le indicó que en los bosques se oían <strong>de</strong> vez en cuando tiros <strong>de</strong> fusil y<br />

solían surgir <strong>de</strong> allí unos jóvenes mugrientos a mendigar comida y robar gallinas, pero en<br />

verdad nadie pensaba que fueran el primer esbozo <strong>de</strong> un proyecto revolucionario para<br />

todo el continente, sino tan sólo una secta <strong>de</strong> religión hereje inspirada en la India, como<br />

otras ya vistas en esos parajes. Esos datos bastaron al Profesor Leal para dar con el<br />

campamento <strong>de</strong> los guerrilleros. Al verlos cubiertos <strong>de</strong> harapos, sucios y melenudos,<br />

comiendo porotos en lata y sardinas añejas, ejercitándose con un rifle <strong>de</strong> la Primera<br />

Guerra Mundial, picados por las avispas y otros bichos <strong>de</strong>l monte, se le pasó <strong>de</strong> golpe<br />

toda la rabia y lo invadió la compasión siempre presente en su ánimo. Una disciplinada<br />

militancia política lo inducía a consi<strong>de</strong>rar la violencia y el terrorismo como un error<br />

estratégico, sobre todo en un país don<strong>de</strong> se podía alcanzar el cambio social por otros<br />

medios. Estaba convencido <strong>de</strong> que los grupúsculos armados no tenían la menor<br />

oportunidad <strong>de</strong> éxito.<br />

Esos jóvenes sólo lograrían la intervención <strong>de</strong>l ejército regular para masacrarlos. La<br />

revolución, <strong>de</strong>cía, <strong>de</strong>be provenir <strong>de</strong> un pueblo que <strong>de</strong>spierta, toma conciencia <strong>de</strong> sus<br />

<strong>de</strong>rechos y <strong>de</strong> su fuerza, asume la libertad y se pone en marcha, pero jamás <strong>de</strong> siete<br />

niños burgueses jugando a la guerra.<br />

Francisco estaba en cuclillas junto a una pequeña fogata calentando agua, cuando vio<br />

aparecer entre los árboles una figura irreconocible. Era un viejo vestido <strong>de</strong> traje oscuro y<br />

corbata, lleno <strong>de</strong> polvo y abrojos, con una barba crecida <strong>de</strong> tres días y el pelo revuelto,<br />

llevando un pequeño maletín negro en una mano y en la otra una rama seca para<br />

apoyarse. El muchacho se puso <strong>de</strong> pie, sorprendido, y a su alre<strong>de</strong>dor sus compañeros lo<br />

imitaron. Entonces cayó en cuenta <strong>de</strong> quién era.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!