16.02.2017 Views

De amor y de muerte

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Recordaba a su padre como un hombronazo formidable con ojos apasionados y vozarrón<br />

<strong>de</strong> orador, pero en ningún caso como ese ser gastado y triste que avanzaba cojeando, la<br />

espalda encorvada, los zapatos entierrados.<br />

--¡Papá! --alcanzó a <strong>de</strong>cir antes que el sollozo le cortara la voz.<br />

El Profesor Leal, soltando el rústico bastón y la pequeña maleta, abrió los brazos. Su hijo<br />

saltó por encima <strong>de</strong> la hoguera, pasó corriendo <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> sus asombrados camaradas y<br />

se estrechó contra su padre, comprobando <strong>de</strong> paso que ya no podía refugiarse en su<br />

pecho, porque medía media cabeza más y era mucho más fornido.<br />

--Tu madre te espera.<br />

--Voy.<br />

Mientras el muchacho buscaba sus cosas, el Profesor aprovechó la ocasión para endilgar<br />

un discurso a los <strong>de</strong>más, argumentando que si querían una revolución <strong>de</strong>bían proce<strong>de</strong>r<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> ciertas normas y jamás mediante la improvisación.<br />

--No improvisamos, somos pekinistas --dijo uno.<br />

--Estáis locos. Lo que sirve para los chinos no funciona aquí --replicó el Profesor<br />

categóricamente.<br />

Mucho más tar<strong>de</strong> esos mismos jóvenes irían por montes, sierras y selvas repartiendo<br />

balas y consignas asiáticas en pueblos olvidados por la historia americana. Pero eso no lo<br />

podía sospechar el Profesor cuando se llevó a su hijo <strong>de</strong>l campamento. Los muchachos<br />

los vieron alejarse abrazados y se encogieron <strong>de</strong> hombros.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!