16.02.2017 Views

De amor y de muerte

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

emplazar la justicia por caridad, don<strong>de</strong> era necesario. Por ésas y muchas otras razones,<br />

José lo consi<strong>de</strong>ró la única esperanza para <strong>de</strong>senterrar el secreto <strong>de</strong> Los Riscos.<br />

En ese momento se encontraban en la oficina <strong>de</strong>l Car<strong>de</strong>nal.<br />

Sobre la pesada mesa <strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ra antigua se <strong>de</strong>stacaban las fotografías bañadas por la<br />

luz que a raudales entraba a través <strong>de</strong> los vidrios. <strong>De</strong>s<strong>de</strong> su silla, el visitante podía<br />

apreciar en la ventana el límpido cielo <strong>de</strong> primavera y las copas <strong>de</strong> los árboles<br />

centenarios <strong>de</strong> la calle. La habitación estaba <strong>de</strong>corada con muebles oscuros y anaqueles<br />

con libros. En las pare<strong>de</strong>s <strong>de</strong>snudas sólo había una cruz <strong>de</strong> alambres <strong>de</strong> púas, enviada<br />

<strong>de</strong> regalo por los <strong>de</strong>tenidos <strong>de</strong> un campo <strong>de</strong> concentración. Sobre una mesa con ruedas<br />

estaba servido el té en gran<strong>de</strong>s tazas <strong>de</strong> loza blanca, acompañado por masas <strong>de</strong> hojaldre<br />

y mermelada provenientes <strong>de</strong>l convento <strong>de</strong> las carmelitas. José Leal bebió el último sorbo<br />

<strong>de</strong> té y recogió las fotografías, colocándolas <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> su maletín <strong>de</strong> plomero. El Car<strong>de</strong>nal<br />

presionó un timbre y <strong>de</strong> inmediato apareció su secretario.<br />

--Por favor, cite hoy mismo a las personas <strong>de</strong> esta lista --or<strong>de</strong>nó entregándole una hoja<br />

don<strong>de</strong> su perfecta caligrafía había anotado una serie <strong>de</strong> nombres. El secretario salió y el<br />

sacerdote se volvió hacia José--. ¿Cómo supo esta historia, padre Leal?<br />

--Ya se lo dije, Eminencia. Es un secreto <strong>de</strong> confesión --sonrió José dando a enten<strong>de</strong>r<br />

que no <strong>de</strong>seaba hablar <strong>de</strong> ello.<br />

--Si la policía <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> interrogarlo, no aceptará esa respuesta.<br />

--Correré ese riesgo.<br />

--Espero que no sea necesario. Entiendo que usted ha sido <strong>de</strong>tenido un par <strong>de</strong> veces,<br />

¿no es así?<br />

--Sí, Eminencia.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!