Los jóvenes en un mundo en transformación Prof ... - Xuventude.net
Los jóvenes en un mundo en transformación Prof ... - Xuventude.net
Los jóvenes en un mundo en transformación Prof ... - Xuventude.net
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
permitido que se vaya moderando aquella cifra, aquellos porc<strong>en</strong>tajes de crecimi<strong>en</strong>to<br />
que <strong>en</strong> los años 70-80 nos preocupaban tanto.<br />
Sin embargo, como les decía, exist<strong>en</strong> <strong>un</strong>as <strong>en</strong>ormes asimetrías, asimetrías de<br />
género, de calidad de vida, asimetrías de conocimi<strong>en</strong>tos. No compartimos los<br />
conocimi<strong>en</strong>tos. ¿Por qué? Pues porque de esta manera explotamos, de esta manera<br />
somos “nosotros” los que seguimos utilizando sus recursos, originándose<br />
<strong>un</strong>a nueva dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia, <strong>un</strong> nuevo colonialismo. Hay <strong>un</strong> “colonialismo tecnológico”<br />
clarísimo. ¿Ustedes han p<strong>en</strong>sado alg<strong>un</strong>a vez de dónde vi<strong>en</strong>e normalm<strong>en</strong>te<br />
el pescado que comemos, el gas que consumimos, el petróleo, los fosfatos,<br />
la mayor parte de las materias primas? Pues vi<strong>en</strong><strong>en</strong> de todos estos países con<br />
los cuales no hemos compartido conocimi<strong>en</strong>tos y sigu<strong>en</strong> si<strong>en</strong>do los grandes suministradores.<br />
De <strong>un</strong> lado, no hemos compartido con ellos conocimi<strong>en</strong>tos y, de<br />
otro, no hemos cumplido nuestras promesas, porque les dijimos <strong>en</strong> el año 74,<br />
creo que fue <strong>en</strong> octubre del 74: “Nosotros al m<strong>en</strong>os les vamos a ayudar para que<br />
ustedes puedan t<strong>en</strong>er <strong>un</strong> cierto desarrollo <strong>en</strong>dóg<strong>en</strong>o, <strong>un</strong> cierto desarrollo de su<br />
propio país, de ustedes mismos”. No ha sido así salvo alg<strong>un</strong>as excepciones: los<br />
países nórdicos, a los que hay que guardar reconocimi<strong>en</strong>to porque son los países<br />
que ayudan realm<strong>en</strong>te a la democracia y los que a escala internacional fortalec<strong>en</strong><br />
<strong>un</strong> cierto marco de responsabilidades públicas. A excepción de estos<br />
países, el promedio de la OCDE no se acerca ni de lejos al 0,7% que, por cierto,<br />
es <strong>un</strong> porc<strong>en</strong>taje muy razonable. Fíj<strong>en</strong>se: los catalanes —que ya sab<strong>en</strong> que<br />
contamos hasta cuando bailamos la sardana— sabemos que cuando damos el<br />
0,7% nos quedamos el 99,3, o sea, que está muy bi<strong>en</strong>, está muy bi<strong>en</strong> y es muy<br />
razonable. Pues ni eso, ni eso hemos sabido hacer. El promedio de la OCDE<br />
<strong>en</strong> estos mom<strong>en</strong>tos se sitúa <strong>en</strong> el 0,21. Es <strong>un</strong> disparate.<br />
No hemos cumplido las promesas, no compartimos el conocimi<strong>en</strong>to, explotamos<br />
sus recursos y todavía nos extrañan los flujos migratorios, la viol<strong>en</strong>cia,<br />
el terrorismo”. Se están creando <strong>un</strong>os caldos de cultivo de desesperanza.¿Cómo<br />
puede ser que la g<strong>en</strong>te viva <strong>en</strong> estas condiciones?. Como he t<strong>en</strong>ido la<br />
oport<strong>un</strong>idad de ver lo que es la guerra, lo que es la viol<strong>en</strong>cia, lo que sucedió <strong>en</strong><br />
Ruanda, <strong>en</strong> Bosnia... por eso se lo cu<strong>en</strong>to, para que ustedes lo sepan y no lo vivan.<br />
A mis hijos y nietos les digo: “Si os lo cu<strong>en</strong>to con cierta vehem<strong>en</strong>cia es porque<br />
no quiero que lo veáis vosotros, que lo viváis vosotros, pero quiero que sepáis<br />
hasta qué p<strong>un</strong>to cuando hay viol<strong>en</strong>cia no hay nada más que viol<strong>en</strong>cia”.<br />
Hemos pasado la vida construy<strong>en</strong>do <strong>un</strong>as escuelas, proporcionando <strong>un</strong>as becas,<br />
perforando pozos..., tantas ONG’s trabajando por eso y, <strong>en</strong> <strong>un</strong> mom<strong>en</strong>to, <strong>en</strong><br />
<strong>un</strong> día, todo desaparece y no hay más que viol<strong>en</strong>cia, no hay más que prácticas<br />
y conductos que ustedes no puedan imaginar porque para sobrevivir se hace lo<br />
que nadie podía p<strong>en</strong>sar <strong>un</strong>os instantes antes que iba a hacer.<br />
No t<strong>en</strong>emos que poner al m<strong>un</strong>do <strong>en</strong> esta tesitura. T<strong>en</strong>emos que decir <strong>un</strong>a vez,<br />
que la fuerza ya ha cumplido su papel y ha sido <strong>un</strong> papel terrorífico. ¡En el siglo<br />
XX, hemos descubierto e inv<strong>en</strong>tado tantas cosas!. ¡Qué maravilla, qué manera de<br />
transportarnos, qué manera de com<strong>un</strong>icarnos, qué manera de poder vac<strong>un</strong>arnos<br />
contra <strong>en</strong>fermedades que eran terribles!. Recuerdo la polio <strong>en</strong> los años 46-47...<br />
<strong>Los</strong> <strong>jóv<strong>en</strong>es</strong> <strong>en</strong> <strong>un</strong> m<strong>un</strong>do <strong>en</strong> <strong>transformación</strong><br />
195