02.08.2021 Views

ready-player-one-ernest-cline

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—¿Dónde estás? —pregunté al aire.

—Estoy muerta, como todos los demás —dijo Hache—. Todos menos tú.

—¿Entonces por qué te oigo?

—Og nos ha conectado a tus alimentadores de vídeo y audio —respondió

—. Para que podamos ver lo que ves y oír lo que oyes.

—Ah.

—¿Te molesta, Parzival? —oí que me preguntaba Og—. Si te importa,

dilo.

—No, no, no me molesta —dije, tras pensarlo un momento—. ¿Shoto y

Art3mis también me oyen?

—Sí —intervino Shoto—. Estoy aquí.

—Sí, sí, estamos aquí —dijo Art3mis, y por su voz noté que apenas

disimulaba la rabia—. Y estamos más muertos que muñecos. La cuestión es,

¿por qué no estás muerto tú también, Parzival?

—Sí, Zeta —insistió Hache—. Tenemos cierta curiosidad. ¿Qué ha

pasado?

Saqué la moneda y la sostuve a la altura de los ojos.

—Yo había obtenido esta moneda en Archaide hace unos meses, como

premio por jugar una partida perfecta de Pac-Man. Era un artefacto, sí, pero

nunca llegué a saber para qué servía. No hasta ahora. Y resulta que me ha

proporcionado una vida extra.

Durante un momento no oí más que silencio. Y entonces Hache se echó a

reír.

—Qué suerte tiene el muy hijo de puta —dijo—. Los canales de noticias

informan de que todos los avatares del sector han muerto. Más de la mitad

de la población de Oasis.

—¿Ha sido el Cataclista? —pregunté.

—Ha tenido que serlo —respondió Art3mis—. Seguramente los sixers

debieron de comprarlo cuando salió a subasta hace unos años. Y lo han

mantenido guardado, esperando el momento adecuado para hacerlo explotar.

—Pero también se han cargado a la mitad de sus tropas —añadió Shoto

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!