02.08.2021 Views

ready-player-one-ernest-cline

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

nacimiento. La diferencia era que ya no intentaba ocultarla con el flequillo

largo. Llevaba el pelo recogido, peinado hacia atrás, para que pudiera verla.

Esperé en silencio. Pero ella no alzaba la vista.

—Eres exactamente como imaginaba. Preciosa.

—¿De verdad? —preguntó ella en voz baja.

Se volvió despacio para mirarme, para verme poco a poco, empezando

por los pies y alzando la vista hasta llegar a mi cara. Cuando nuestros ojos se

encontraron, me sonrió, nerviosa.

—¿Pues sabes una cosa? Que tú también eres como siempre creí que

serías: feo como el culo.

Nos echamos a reír y casi toda la tensión que se respiraba en el ambiente

se disipó. Entonces nos miramos a los ojos durante lo que me pareció una

eternidad. Me di cuenta de que era la primera vez que lo hacíamos.

—No nos hemos presentado formalmente —dijo—. Soy Samantha.

—Hola, Samantha. Yo soy Wade.

—Me alegro de conocerte en persona por fin, Wade.

Dio una palmadita al banco, y me senté a su lado.

Tras un largo silencio, me preguntó:

—¿Y qué va a pasar ahora?

Sonreí.

—Vamos a usar toda la pasta que acabamos de ganar para dar de comer a

la gente de todo el planeta. Vamos a hacer del mundo un lugar mejor, ¿no?

Ella sonrió.

—¿Ya no quieres construir una inmensa estación interestelar llena de

videojuegos, comida basura y sofás cómodos para encerrarte en ella?

—También estoy dispuesto a eso —respondí—, si eso significa que voy

a pasar el resto de mi vida contigo.

Me dedicó una sonrisa tímida.

—Eso habrá que verlo. Acabamos de conocernos.

—Estoy enamorado de ti.

A Samantha empezó a temblarle el labio inferior.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!