08.05.2013 Views

Los tiempos del cuidado - Imserso

Los tiempos del cuidado - Imserso

Los tiempos del cuidado - Imserso

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

con la viudedad y la soledad, dan lugar a lo que se ha denominado la “feminización de la dependencia”<br />

(Delicado Useros, 2003). La EDDES estima que el número de mujeres con discapacidad superaba en medio<br />

millón al de varones y que su riesgo de adquirir una discapacidad era un 17% mayor en 1999. Las<br />

mujeres con discapacidad tienen mayores carencias en el acceso a rehabilitación, educación, empleo,<br />

asistencia financiera, menores niveles de matrimonio y mayores probabilidades de ser estigmatizadas<br />

que los hombres (Pentland & McColl, 1999b).<br />

Las personas mayores son, conviene recordarlo, un importante activo para las sociedades actuales. La<br />

ayuda directa e indirecta a sus hijos, el <strong>cuidado</strong> de los nietos y el voluntariado en organizaciones <strong>del</strong><br />

Tercer Sector son actividades ya generalizadas entre los mayores que juegan un papel fundamental en<br />

la vertebración social y económica de la sociedad española. Las personas mayores constituyen además<br />

un gran potencial de mercado para muchos sectores productivos (turismo, ayudas técnicas, ocio y entretenimiento,<br />

etc.), por la capacidad económica real que se les presupone: se estima que los mayores<br />

son titulares (año 2010) <strong>del</strong> 25% de la masa monetaria circulante (De Lorenzo, 2003).<br />

2. EL MODELO DE ATENCIÓN A LAS PERSONAS MAYORES<br />

DEPENDIENTES EN ESPAÑA<br />

A. ESTADO, MERCADO Y FAMILIA<br />

Todas las sociedades se organizan de un modo u otro para hacer frente a la dependencia. De la misma<br />

forma, en todas las sociedades cada individuo desarrolla, conscientemente o no, un conjunto de preparativos<br />

para el final de su vida. Según Kemp & Denton (2003), estos preparativos consisten en: (1)<br />

la protección pública, que se refiere a los beneficios provistos por el Estado, tales como el <strong>cuidado</strong> a la<br />

salud o las pensiones públicas, (2) la auto-aseguración (self-insurance), que se refiere a la preparación<br />

financiera privada, como ahorros o pensiones privadas, y (3) la auto-protección, que se refiere a la preparación<br />

no financiera, como actividades saludables para mantener la autonomía.<br />

Desde comienzos de los años 90 la dependencia se ha conceptuado como un nuevo riesgo social (Guillemard,<br />

1992, en Bazo & Ancizu, 2004). La aproximación al mo<strong>del</strong>o de atención a la dependencia significa<br />

conocer cómo una sociedad se organiza para gestionar los riesgos derivados de la discapacidad. El<br />

riesgo no es sólo individual, sino también social. Según Esping-Andersen (2000), un riesgo individual se<br />

convierte en social cuando: (1) el destino de un individuo tiene consecuencias colectivas; (2) la sociedad<br />

reconoce los riesgos como merecedores de atención pública; o (3) una parte de los riesgos se originan<br />

en fuentes que escapan al control de cualquier individuo. Para este autor, las fuentes principales para la<br />

gestión <strong>del</strong> riesgo social son el Estado, el mercado y la familia. Cuando se habla de mo<strong>del</strong>os de atención<br />

a la dependencia se alude al grado y tipo de participación de lo público y al papel desarrollado por el<br />

mercado y la familia.<br />

Cada una de estas esferas considera al <strong>cuidado</strong>r informal como un recurso (familias y sistema público),<br />

un co-trabajador (mercado y servicios públicos) o un cliente (mercado) (Jamieson & Illsley,<br />

LAS DIMENSIONES DEL PROBLEMA: EL ENVEJECIMIENTO Y LA ATENCIÓN A LA DEPENDENCIA EN ESPAÑA<br />

75

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!