13.07.2015 Views

Leer-Diecisiete-contradicciones-y-el-fin-del-capitalismo

Leer-Diecisiete-contradicciones-y-el-fin-del-capitalismo

Leer-Diecisiete-contradicciones-y-el-fin-del-capitalismo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Contradicción 8. Tecnología, trabajo y disponibilidad humana | 107esto), ¡ése era <strong>el</strong> tipo de economía política que Marx propugnó tiempo atrásen los Grundrisse! Sólo de esa forma, sugiere Arthur, podremos captar «lascualidades de la tecnología moderna, su conectividad, su adaptabilidad, sutendencia a evolucionar, su cualidad orgánica, su vitalidad desordenada» 5 .Las consecuencias de esta concepción de la tecnología para nuestracomprensión d<strong>el</strong> carácter evolutivo d<strong>el</strong> capital como motor económicoson considerables:La aparición de nuevas tecnologías no sólo trastorna <strong>el</strong> statu quo presentandonuevas combinaciones que son mejores versiones de los bienesy métodos que usamos. Pone en marcha una cadena de adaptacionestecnológicas y de nuevos problemas, y al hacerlo crea nuevos nichosde oportunidad que exigen nuevas combinaciones, que a su vezinducen nuevas tecnologías y nuevos problemas […] La economíase mantiene, por lo tanto, en perpetua apertura al cambio, en perpetuanovedad. Se halla perpetuamente en un proceso de autocreación.Está siempre insatisfecha […] La economía se está construyendo a símisma perpetuamente 6 .Nuevas configuraciones tecnológicas desplazan a las más antiguas, y alhacerlo inician fases de lo que <strong>el</strong> economista Joseph Schumpeter denominócélebremente «vendavales de destrucción creativa» 7 . Todo un modo devida, de ser y de pensar, tiene que alterarse drásticamente para interiorizarlo nuevo a expensas de lo antiguo. La reciente historia de la desindustrializacióny su asociación con espectaculares reconfiguraciones tecnológicases un caso obvio. El cambio tecnológico nunca es gratuito ni indoloro y sucoste y <strong>el</strong> dolor que produce no se reparten por igual, por lo que siemprehay que preguntarse quién sale favorecido de la creación y quién carga con<strong>el</strong> peso de la destrucción.Así, pues, ¿qué pap<strong>el</strong> desempeñan en ese proceso las necesidadesy requerimientos propios d<strong>el</strong> capital? Curiosamente, Arthur ignoralas especificidades de esta cuestión en su estudio, por otra parte muyperspicaz. Yo argumentaría que en la historia y la lógica d<strong>el</strong> capital haycinco imperativos tecnológicos dominantes que se solapan parcialmente.Considerémoslos brevemente:1. La organización de la cooperación y de las divisiones d<strong>el</strong> trabajo deformas que maximicen la eficiencia, la rentabilidad y la acumulación.Desde los prolegómenos en <strong>el</strong> ejemplo de la fábrica de alfileres de Adam5W. B. Arthur, The Nature of Technology, cit., p. 213; Karl Marx, Grundrisse, cit. [ed. alemana:Grundrisse, cit.; ed cast.: Elementos fundamentales para la crítica de la economía política, cit.].6Ibid., p 191.7Joseph Schumpeter, Capitalism, Socialism and Democracy, Londres, Routledge, 1942, pp. 82-83[ed. cast.: Capitalismo, socialismo y democracia, Barc<strong>el</strong>ona, Folio, 1984].

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!