13.07.2015 Views

Leer-Diecisiete-contradicciones-y-el-fin-del-capitalismo

Leer-Diecisiete-contradicciones-y-el-fin-del-capitalismo

Leer-Diecisiete-contradicciones-y-el-fin-del-capitalismo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

64 | <strong>Diecisiete</strong> <strong>contradicciones</strong> y <strong>el</strong> <strong>fin</strong> d<strong>el</strong> <strong>capitalismo</strong>Esos objetivos tienen sentido cuando se aplican al dinero y al crédito.La recuperación d<strong>el</strong> dinero y <strong>el</strong> crédito como bienes comunes democráticamenteregulados es imperiosa para invertir la tendencia haciala autocracia y <strong>el</strong> despotismo monetario. Es imperativo disociar lasactividades de creación monetaria d<strong>el</strong> aparato estatal en nombre d<strong>el</strong>fortalecimiento y democratización de las libertades y de la libertad colectivas.Dado que <strong>el</strong> poder d<strong>el</strong> Estado capitalista descansa en buena partesobre los pilares gem<strong>el</strong>os d<strong>el</strong> monopolio sobre <strong>el</strong> uso legítimo de la violenciay <strong>el</strong> poder monopolístico sobre los asuntos monetarios y sobre lamoneda, <strong>el</strong> resquebrajamiento de este último llevaría consigo en últimotérmino la disolución (más que <strong>el</strong> «aplastamiento») d<strong>el</strong> poder estatalcapitalista. Una vez privado d<strong>el</strong> poder sobre sus recursos monetarios,la capacidad d<strong>el</strong> Estado para recurrir a la violencia militarizada contrasu propia población reb<strong>el</strong>de quedaría también aniquilada. Aunque éstapueda parecer una idea improbable, parte de <strong>el</strong>la se ha materializado yaen la utilización d<strong>el</strong> poder de los bonistas en países como Grecia, Italia yEspaña para dictar la política estatal hacia sus propias poblaciones. Bastasustituir <strong>el</strong> poder de los bonistas por <strong>el</strong> poder d<strong>el</strong> pueblo y esa tendenciatan visible podría ser invertida con la misma facilidad.El poder estatal es, como ya he dicho, genérico más que particular. Deahí que esa política tendría que disolver todas esas instituciones monetariasinternacionales (como <strong>el</strong> FMI) erigidas para apoyar <strong>el</strong> imperialismo d<strong>el</strong>dólar estadounidense y que sirven para mantener su hegemonía <strong>fin</strong>ancieraen <strong>el</strong> sistema mundial. El mecanismo disciplinario que está destruyendoactualmente la vida cotidiana d<strong>el</strong> pueblo griego, así como la de muchosotros que han sufrido las intervenciones d<strong>el</strong> FMI (habitualmente en combinacióncon otros poderes estatales multilaterales, como <strong>el</strong> Banco CentralEuropeo y la Comisión Europea en la llamada Troika) debería desmant<strong>el</strong>arsey dar paso a prácticas e instituciones de gestión colectiva de la riquezacomún de la población. Tal solución puede parecer abstracta y utópica enr<strong>el</strong>ación con la práctica actual, pero para emprender una política alternativaes vital tener en mente ese tipo de visión y ambición a largo plazo.Deben formularse planes radicales, ya se les llame revolucionarios o reformistas,para impedir que la civilización se ahogue en la contradicción entrepropiedad privada insensible y desregulada y poderes estatopoliciales cadavez más autocráticos y militarizados, consagrados a defender al capital y no<strong>el</strong> bienestar d<strong>el</strong> pueblo.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!