Derecho Procesal Penal .pdf - AECID

MANUAL DE DERECHO PROCESAL PENAL
TEMA 29
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recurso de apelación se ha restringido a servir de sólo contra las resoluciones que esa ley
autoriza.
Ha sido con relación a la resolución definitiva que pone fin al proceso (sentencias
condenatoria o absolutoria), emitida por el Tribunal de Sentencia, donde la apelación ha
perdido la enorme relevancia que tenía en el pasado, ya que contra estos fallos sólo cabe
interponer el recurso de casación. Ello porque en el sistema de valoración de la prueba de
“sana crítica racional”, sólo el tribunal que ha participado del debate, es el único
facultado a hacer la selección de la prueba que le convence, por lo que sobre esa
actividad ya no se puede mediante apelación, como recurso abierto, sin límites (en cuanto
a los motivos en que se puede fundamentar para atacar el fallo emitido), revisar esa
selección probatoria, puesto que el tribunal de alzada no ha gozado de la inmediación de
la prueba, como lo hizo el tribunal de la vista. Razón que fundamenta que, contra las
sentencias emitidas por el Tribunal de Sentencia, sólo cabe el recurso de casación, que se
autoriza sólo en casos en que la ley lo concibe y no otros, respetando ese privilegio del
que sólo goza el a-quo (Tribunal de Sentencia), en cuanto al contacto directo con la
prueba, lo cual lo sitúa como el único órgano con propiedad para decidir qué medios de
prueba deben encaminar su conclusión sobre el hecho.
135.1 Concepto.
El término “apelación” proviene de la palabra “apellatio” del derecho romano,
que significa “provocación” o “reclamación”.
Puede definirse como una vía o instrumento de impugnación ordinario en el cual
se pueden atacar los vicios de derecho sustantivo como de derecho procesal de los que
adolece la resolución emitida por un órgano inferior, que tiene como propósito someter
esa decisión a la revisión de un tribunal de instancia superior para que la revoque o
modifique.
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