Ley de Defensa Nacional - Ministerio de Defensa
Ley de Defensa Nacional - Ministerio de Defensa
Ley de Defensa Nacional - Ministerio de Defensa
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
45a. reunión - continuación 5a. sesión extraordinaria<br />
conducta, la concepción y la permanente lucha ciudadana <strong>de</strong> la Unión Cívica Radical y <strong>de</strong> sus<br />
hombres.<br />
Resulta claro, entonces, que no estamos a favor <strong>de</strong> ninguna forma <strong>de</strong> represión i<strong>de</strong>ológica;<br />
que éste es un proyecto <strong>de</strong> ley que se opone a la doctrina <strong>de</strong> la seguridad nacional, porque nos<br />
manifestamos permanentes luchadores por la dignidad humana y contra los golpes <strong>de</strong> Estado<br />
reaccionarios y anti<strong>de</strong>mocráticos que tantas veces se han producido en nuestra crítica historia<br />
institucional.<br />
Han quedado <strong>de</strong>finidas las líneas <strong>de</strong> este <strong>de</strong>bate. Hay quienes están con los procesos militares<br />
y justifican los golpes <strong>de</strong> Estado —lo dicen implícita o explícitamente— y hay quienes estamos<br />
por las causas populares, <strong>de</strong>mocráticas y progresistas, quienes <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>mos la <strong>de</strong>mocracia como<br />
instrumento y como fin. Esto ha quedado <strong>de</strong> manifiesto en este <strong>de</strong>bate.<br />
Por eso esta noche las gran<strong>de</strong>s corrientes populares votarán afirmativamente este proyecto<br />
<strong>de</strong> ley <strong>de</strong> <strong>Defensa</strong> <strong>Nacional</strong>, en contra <strong>de</strong> cualquier intento que en el futuro pretenda que nuevamente<br />
las Fuerzas Armadas sean utilizadas, con la excusa <strong>de</strong> una comnoción o conflicto político<br />
interno, para llevar a cabo golpes <strong>de</strong> Estado en nuestra Argentina y en Latinoamérica. (Aplausos).<br />
Sr. Presi<strong>de</strong>nte (Duhal<strong>de</strong>).—Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.<br />
Sr. Lestelle.—Señor presi<strong>de</strong>nte: las posiciones expuestas en el <strong>de</strong>bate sobre este importantísimo<br />
proyecto <strong>de</strong> ley que enmarca un sistema <strong>de</strong> conducción política <strong>de</strong> las Fuerzas Armadas<br />
han reflejado esta noche lo que es la realidad <strong>de</strong> nuestro país: por un lado, una mayoría memoriosa<br />
que representa al 93 por ciento <strong>de</strong> nuestra población y, por otro, una microminoría liberal,<br />
sorda, que representa un 7 por ciento. Esto nos <strong>de</strong>fine un principio <strong>de</strong> <strong>de</strong>mocracia elaborada y<br />
<strong>de</strong>fendida por todos nosotros.<br />
Pero la ocasión es propicia para rememorar algunos hechos, en virtud <strong>de</strong>l <strong>de</strong>safío que acaban<br />
<strong>de</strong> hacer los representantes liberales para que hablemos claro, con cristalinidad y transparencia.<br />
Quisiera recordarles, en primer lugar, que tienen representación en esta Cámara <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace cuatro<br />
años, por medio <strong>de</strong>l señor diputado Alsogaray, quien tuvo suficiente tiempo para elaborar un<br />
proyecto <strong>de</strong> ley más perfecto que éste.<br />
En segundo lugar, quisiera que tengan en cuenta algunos aspectos puntuales que han mencionado<br />
en el día <strong>de</strong> ayer: esto es, la diferenciación que la señora diputada Alsogaray hiciera<br />
entre pueblo y ciudadano. Nosotros somos pueblo; nos presentamos como tales. No nos interesa<br />
hablar <strong>de</strong> ciudadanos pensando exclusivamente en la búsqueda <strong>de</strong> votos. Somos hijos <strong>de</strong> un<br />
pueblo que tiene callos en las manos por trabajar por esta <strong>de</strong>mocracia que tanto nos ha costado<br />
conseguir, y no callos en los nudillos por golpear a las puertas <strong>de</strong> los cuarteles.<br />
En el día <strong>de</strong> ayer la señora diputada Alsogaray hizo referencia a sus antepasados y habló <strong>de</strong><br />
sus tatarabuelos. Nosotros preferimos <strong>de</strong>cir que somos tataranietos <strong>de</strong> criollos perseguidos por<br />
tatarabuelos que ya en aquella época respondían al colonialismo inglés. También queremos manifestar<br />
que somos hijos <strong>de</strong> un pueblo, no hijos <strong>de</strong> estancieros que emplean a ese pueblo pagándole<br />
un salario que quizá es la tercera parte <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong> algunos “mo<strong>de</strong>litos” que se lucen en esta<br />
Cámara y que <strong>de</strong>sfilan permanentemente <strong>de</strong>lante nuestro; y por si ese sueldo fuera mucho, a los<br />
paisanos que emplean les <strong>de</strong>scuentan el precio <strong>de</strong> los vicios: el pan, la yerba y el azúcar. Nosotros<br />
somos pueblo, señor presi<strong>de</strong>nte, y quizá por ello nos hemos puesto <strong>de</strong> acuerdo alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> un<br />
proyecto <strong>de</strong> tanta trascen<strong>de</strong>ncia.<br />
Esa podrá ser la razón por la que esas minorías no alcanzan a enten<strong>de</strong>r este tipo <strong>de</strong> acuerdos.<br />
Debemos hacernos a la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que antes estas concordancias entre radicales y peronistas, intransigentes<br />
y <strong>de</strong>mócratas cristianos, seguirán intercalándose entre nosotros.<br />
Estos sectores minoritarios tienen cierta particularidad: en la <strong>de</strong>mocracia buscan votos y a<br />
veces “ligan” alguna diputación, y en los gobiernos <strong>de</strong> facto buscan botas, y a veces logran <strong>de</strong><br />
regalo alguna gobernación o ministerio. (Aplausos). Nosotros somos pueblo.<br />
Pero como bien señalara ayer el señor diputado Alen<strong>de</strong>, vayamos al presente. ¿Por qué nos<br />
195<br />
1987-1988