Ley de Defensa Nacional - Ministerio de Defensa

32a. reunión - continuación 10a. sesión extraordinaria
Constitución, que en su primera parte expresa: “Todo ciudadano argentino está obligado a armarse
en defensa de la patria y de esta Constitución, conforme a las leyes que al efecto dicte el
Congreso y a los decretos del Ejecutivo Nacional”.
En el artículo 4º se establece la necesidad de deslindar los aspectos que hacen a la Defensa
Nacional de los de la seguridad interior. Se intenta con este artículo evitar la puesta en práctica
de doctrinas como la de la seguridad nacional a que hicimos referencia anteriormente, lo que se
pone de manifiesto claramente más adelante en el artículo 13 y en el cuadro anexo sobre mecanismos
de alerta.
Señor presidente: consideramos que con estos artículos queda suficientemente aclarado lo
que hay que defender, los medios a emplear y el ámbito geográfico de aplicación, así como también
el doble sentido de derecho y deber que encierran para los argentinos las previsiones y acciones
de un sistema de defensa concebido, como decíamos, en esta forma integral.
En el Título II del proyecto se establecen las finalidades del sistema de defensa, desarrolladas
en todos sus aspectos de tipo técnico, hipótesis de conflicto, de guerra, de confluencia, los planes
estratégicos, la movilización de recursos humanos y materiales y las acciones de la posguerra.
Esto es lo reglado por el Título II, que habíamos llamado “Órganos y misiones”.
En el Título III, llamado ahora “Estructura del sistema de defensa”, se establecen cuáles son
los integrantes de dicho sistema. El artículo 9º, en sus incisos a) a h), menciona al presidente de
la Nación, al Consejo de Defensa Nacional, al Congreso de la Nación, al Ministerio de Defensa,
al Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, a las tres Fuerzas Armadas, a las fuerzas de
seguridad y, finalmente, al pueblo de la Nación, tanto en la paz como en la guerra. El inciso h),
que es el que precisamente se refiere al pueblo, que en su momento muy debatido pero a nuestro
juicio, es correcta su inclusión en el presente proyecto y recalco, como decíamos antes, el carácter
integral del problema de la defensa que excede el campo específicamente militar.
En el artículo 10º se ratifican la atribución del presidente de la Nación como jefe supremo de
ella y sus competencias y responsabilidades en la conducción de la defensa, de acuerdo con nuestros
enunciados constitucionales. Esto aclara muchas dudas que se han planteado en este recinto.
Por los incisos a) y b) del artículo 10º se crean organismos dependientes del presidente. Me
refiero al Consejo de Defensa Nacional para la conducción integral de la guerra y el Comité de
Crisis para la conducción militar de la misma. Con ésto también queda aclarada otra de las dudas
que se plantearon en su momento.
El artículo 11 establece las atribuciones del ministro de Defensa y el 12 define las del Consejo
de Defensa Nacional.
El artículo 13 establece con precisión un conjunto de situaciones de determinado carácter
y gravedad y específica, a su vez, el conjunto de medios para hacer frente a tales situaciones. El
presidente de la Nación, asesorado por el Consejo de Defensa, determinará los medios a emplear
en cada ocasión. Tales situaciones y medios se articulan entre sí, formando mecanismos de alerta
que responden con medios determinados a situaciones determinadas. Asimismo, estos mecanismos
de alerta limitan en algunas situaciones el empleo de algunos medios.
Todo esto puede apreciarse en el cuadro anexo al presente proyecto que describe en sentido
horizontal las posibles situaciones de conflicto, a través de tres áreas: en primer lugar, la internacional
que se subdivide, a su vez, en los sectores diplomático, económico, político y militar.
La segunda área corresponde a la situación de conflicto nacional, subdividida a su vez en cuatro
partes: conflicto social localizado, conflicto social generalizado, agresión interna y agresión militar.
Ésta última está definida como el alzamiento contra las autoridades constitucionales por
parte de los integrantes de las Fuerzas Armadas y de seguridad. La tercera área corresponde a la
situación de desastres y comprende los siguientes aspectos: inundaciones, terremotos, epidemias,
incendios y hambre.
Por su parte, cada una de las situaciones indicadas, a través de las subdivisiones que he
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1987-1988