Descargar el Libro en PDF aquí - Vaticanocatolico.com
Descargar el Libro en PDF aquí - Vaticanocatolico.com
Descargar el Libro en PDF aquí - Vaticanocatolico.com
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
238<br />
Esta historia fascinante nos muestra cómo <strong>el</strong> Todopoderoso consigue que un alma sea<br />
bautizada. Si la mujer no hubiera caído <strong>en</strong> las aguas h<strong>el</strong>adas, San Isaac no habría t<strong>en</strong>ido la<br />
oportunidad de bautizar a su bebé. Es muy obvio que Dios lo dispuso de esta manera para que<br />
ese niño recibiera <strong>el</strong> sacram<strong>en</strong>to justo antes que Él se lo llevase de este mundo.<br />
Vida de San Isaac Jogues, p. 225: “Dos de los hurones, Jogues lo sabía, iban a ser<br />
quemados a muerte esa noche <strong>en</strong> Tionontogu<strong>en</strong>. Él se quedó con <strong>el</strong>los <strong>en</strong> la<br />
plataforma y conc<strong>en</strong>traba sus súplicas por <strong>el</strong>los. Finalm<strong>en</strong>te consintieron. En<br />
ese mom<strong>en</strong>to, los mohicanos lanzaron a los prisioneros un poco de maíz crudo<br />
recién cosechado. Las cáscaras [d<strong>el</strong> maíz] estaban húmedas por las reci<strong>en</strong>tes<br />
lluvias. El Padre Jogues recogió cuidadosam<strong>en</strong>te las preciosas gotas de agua<br />
sobre una hoja y las vertió sobre las cabezas de los dos neófitos [nuevos<br />
conversos], bautizándolos <strong>en</strong> <strong>el</strong> nombre d<strong>el</strong> Padre y d<strong>el</strong> Hijo y d<strong>el</strong> Espíritu Santo.<br />
Los mohicanos <strong>com</strong>pr<strong>en</strong>dieron que la acción [de Joges] les traería f<strong>el</strong>icidad a<br />
estas víctimas odiadas. Ellos rabiaron por su audacia y lo derribaron a golpes,<br />
am<strong>en</strong>azando matarle con los hurones (…) Esa noche los dos hurones [a qui<strong>en</strong>es<br />
él había bautizado] fueron quemados <strong>en</strong> <strong>el</strong> fuego” 574.<br />
Si las cáscaras de maíz no se las hubieran lanzado <strong>en</strong> ese mismo mom<strong>en</strong>to, Jogues no habría<br />
t<strong>en</strong>ido <strong>el</strong> agua con que bautizar a los dos indios. Y, <strong>com</strong>o se señala <strong>en</strong> su vida, San Isaac Jogues<br />
siempre instruía a los paganos <strong>en</strong> lo que era es<strong>en</strong>cial que t<strong>en</strong>ían que saber para <strong>el</strong> bautismo (por<br />
ejemplo, la Trinidad y la Encarnación).<br />
Juan 3; 5, 7: “Respondió Jesús: En verdad, <strong>en</strong> verdad te digo que qui<strong>en</strong> no<br />
r<strong>en</strong>aciere d<strong>el</strong> agua y d<strong>el</strong> Espíritu, no puede <strong>en</strong>trar <strong>en</strong> <strong>el</strong> reino de los ci<strong>el</strong>os (…) No<br />
te maravilles de que te he dicho: Es preciso nacer de arriba”.<br />
OTRAS CITAS DE JOGUES Y JAVIER SOBRE EL BAUTISMO<br />
En la vida de San Isaac Jogues, hay un r<strong>el</strong>ato fascinante de la captura de su grupo por los<br />
salvajes iroqueses. En él <strong>en</strong>contramos <strong>el</strong> empeño de Jogues <strong>en</strong> bautizar a un indio hurón que les<br />
a<strong>com</strong>pañaba. Este es <strong>el</strong> r<strong>el</strong>ato de cuando su grupo fue rep<strong>en</strong>tina e inesperadam<strong>en</strong>te atacado por<br />
los salvajes iroqueses, que querían capturarlos y torturarlos:<br />
Vida de San Isaac Jogues, p. 205: “El más devoto de todos era Atieronhonk, qui<strong>en</strong><br />
Jogues había bautizado <strong>en</strong> <strong>el</strong> primer torr<strong>en</strong>te. El hombre no salía de su<br />
asombro. [Dijo Atieronhonk]: ‘Hay que reconocer que estas personas que vi<strong>en</strong><strong>en</strong><br />
a instruirnos no ti<strong>en</strong><strong>en</strong> ninguna duda de las verdades que nos <strong>en</strong>señan. Ello debe<br />
ser porque sólo Dios es su re<strong>com</strong>p<strong>en</strong>sa. Aquí está Ondessonk [Isaac Jogues]. Él se<br />
olvidó de sí mismo <strong>en</strong> <strong>el</strong> mom<strong>en</strong>to de p<strong>el</strong>igro. Él sólo p<strong>en</strong>só <strong>en</strong> mí, y me habló de<br />
hacerme cristiano. Las balas de mosquete volaban al lado de nuestras orejas, la<br />
www.vaticanocatolico.<strong>com</strong> Derechos reservados © 2004-20011 www.vaticancatholic.<strong>com</strong>