Manual sobre las metodologías para la recolección de datos a

238 ESTADÍSTICAS DEL TRABAJO INFANTIL
entre personas, en cuyo caso todos los entrevistados no contestarán las mismas preguntas
y, por lo tanto, se introduce un sesgo en los resultados.
Si no se utilizan traductores y los entrevistadores hablan el idioma correspondiente,
es necesario asegurarse de que todos los entrevistadores utilicen exactamente las mismas
palabras y frases en todas las entrevistas.
Los acentos y dialectos representan otra cuestión importante respecto a la traducción
de los cuestionarios. Aquí, nuevamente, la organización que implemente la encuesta debe
tomar una decisión, a la luz del tamaño y extensión geográfica de la encuesta, en relación
con el grado en que se puedan satisfacer dichos factores. En algunos casos, la organización
responsable de la encuesta puede contemplar la posibilidad de contar con traductores para
las entrevistas, en lugar de imprimir los cuestionarios traducidos. Los traductores ofrecen
flexibilidad donde los acentos y dialectos puedan variar a lo largo de las zonas muestreadas,
y resultan menos costoso que imprimir cuestionarios traducidos en varios idiomas o
dialectos.
8.3.2 ❚ Evaluación previa de los cuestionarios
Cada borrador de cuestionario debe ser evaluado previamente de manera conjunta por el
coordinador, los supervisores y los entrevistadores antes de su ejecución. 6 Como se mencionó
anteriormente, la evaluación previa identifica las zonas con problemas potenciales,
incluyendo las interpretaciones no anticipadas o los inconvenientes culturales a las preguntas.
Es importante que aquellos que las personas entrevistadas durante la evaluación
previa sean similares a aquellas que van a ser entrevistados durante la encuesta. En efecto,
el proceso de preparar un borrador de cuestionario, y luego probarlo para mejorarlo, es un
proceso reiterativo que podría tener que aplicarse varias veces para lograr el diseño óptimo
del cuestionario.
Para el trabajo de campo, no se debe distribuir ningún cuestionario que no haya sido
probado. El procedimiento de evaluación previa, que se suele realizar antes de la formación
de los entrevistadores, es esencial para determinar si:
las preguntas codificadas son suficientes o si se deben añadir nuevas preguntas;
los entrevistados están dispuestos a responder a las preguntas, según la manera en que
se formularon;
las preguntas se entienden fácilmente;
las preguntas son interpretadas de la misma manera por todos los interesados;
la secuencia de las preguntas presentadas a los entrevistados es lógica;
los cuestionarios son claros en términos de codificación y de las instrucciones a los
entrevistadores;
algunas de las preguntas son particularmente difíciles o delicadas; y
la cantidad media de tiempo requerido por entrevista es apropiada.
Las evaluaciones previas son importantes y pueden indicar la necesidad de cambios.
Las cuestiones y problemas que salen a la superficie después de la evaluación previa, de haber
alguno, deben por tanto ser discutidos minuciosamente entre el equipo encuestador.
6 En algunos países, una «evaluación previa» se conoce como una «prueba piloto». Una prueba piloto
es diferente de un estudio piloto (véase la sección 8.7).