08.05.2013 Views

SÉ - DSpace CEU

SÉ - DSpace CEU

SÉ - DSpace CEU

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

DO de la justicia que se hacia y del monarca que la representaba.<br />

«Después de infinitas vicisitudes, dice el antes citado escri­<br />

tor, recusaciones, quejas y olvido de las leyes de Partida, los<br />

furibundos magistrados' llevaron adelante los procesos, recibien­<br />

do las confesiones de los acusados, contra quienes formalizaron<br />

los cargos. Estribaban estos en los acuerdos tomados por las<br />

Cortes, declarando en el famoso 24 de Setiembre de 1810 la<br />

soberanía de la Nación; en el juramento exijido á los diputa­<br />

dos; en la llamada persecución del obispo de Orense y del<br />

marqués del Palacio, y en otras resoluciones y leyes de menor<br />

importancia votadas por los presos.—Pero en primer lugar es­<br />

cudaban á los vocales déla Asamblea el artículo de la Consti­<br />

tución que los declaraba inviolables, y la ley 5. a<br />

de Partida, tí­<br />

tulo 8.°, libro 3.°.... que prohibe reconvenir en juicio á lospro-<br />

curadores durante su procuración. Y en segundo lugar, si seles<br />

condenaba por haber dado su voto al artículo 3.° de la Consti­<br />

tución , que establecía la soberanía nacional, el fallo debía re­<br />

caer no contra algunos, sino contra todos los que votaron el<br />

artículo: ahora bien, en aquella sesión, que fué la del 29 de<br />

Agosto de 1811, fueron los votantes 152, de los cuales 128<br />

lo aprobaron, y 24 le negaron su sufragio. De los 128 que vo­<br />

taron por la soberanía del Pueblo, solo 15 se hallaban proce­<br />

sados, 1 multado, 2 contumaces, 12 habían muerto, 69 an­<br />

daban libres y sin formación de causa, 13 seguían en el goce<br />

de sus destinos y 16 habían sido premiados por el mismo Fer­<br />

nando. ¿Con qué justicia, pues, osaría un magistrado íntegro<br />

sentenciar á muerte á los hombres por un hecho que era lau­<br />

dable en sus compañeros, y que les había proporcionado ga­<br />

lardones y recompensas de la mano del monarca? ¿Cómo, obran­<br />

do ambos de un mismo modo, puede uno ser traidor y otro fiel

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!