05.09.2019 Views

El infierno de Gabriel_1

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

sin amigos, como una estrella <strong>de</strong>l rock en horas bajas, y <strong>de</strong>cidió<br />

quedarse. Esperaría hasta que estuviese en la cama y se aseguraría<br />

<strong>de</strong> que no vomitara (y se ahogara). Dejó las llaves y la gabardina<br />

sobre el mueble <strong>de</strong>l recibidor. Luego se quitó el abrigo y lo puso<br />

encima <strong>de</strong> su maletín.<br />

<strong>Gabriel</strong> estaba apoyado en la pared, con los ojos cerrados, así<br />

que no había peligro <strong>de</strong> que se diera cuenta <strong>de</strong> que seguía llevando su<br />

jersey, como si fuera una adolescente enamorada.<br />

—Vamos, profesor.<br />

Julia lo apoyó en su hombro y lo ayudó a recorrer el pasillo.<br />

—¿Adón<strong>de</strong> me llevas? —preguntó él, abriendo un ojo.<br />

—A la cama.<br />

<strong>Gabriel</strong> se echó a reír, se apoyó en la pared y separó las piernas<br />

para mantener el equilibrio.<br />

—¿Qué te parece tan gracioso?<br />

—Tú, señorita Mitchell —respondió en un ronco susurro—. Me<br />

llevas a la cama y ni siquiera me has besado. ¿No crees que<br />

<strong>de</strong>beríamos empezar con algún que otro beso? Luego podríamos<br />

hacer manitas un par <strong>de</strong> noches en el sofá y a partir <strong>de</strong> allí ya<br />

pasaríamos a la cama. Ni siquiera he tenido la oportunidad <strong>de</strong><br />

acariciarte, gatita traviesa. Eres virgen, no lo olvi<strong>de</strong>s.<br />

Julia se enfureció, especialmente por el último comentario.<br />

—Tú no has hecho manitas en tu vida. Y no te llevo a la cama,<br />

idiota. Te acompaño hasta allí para que puedas dormir la mona.<br />

Vamos, basta <strong>de</strong> cháchara.<br />

—Bésame, Julianne. Dame un beso <strong>de</strong> buenas noches.<br />

—<strong>Gabriel</strong> la estaba mirando fijamente. Su voz se había convertido en<br />

un murmullo aterciopelado—. Y te prometo que luego me iré a la cama<br />

como un niño bueno. Y tal vez, si te portas bien, <strong>de</strong>jaré que tú te<br />

acurruques a mi lado como una gatita buena.<br />

<strong>El</strong>la ahogó una exclamación. En ese momento no parecía<br />

borracho. Tenía un aspecto bastante lúcido y la estaba acariciando<br />

con la mirada, <strong>de</strong>teniéndose más tiempo <strong>de</strong>l necesario en la zona <strong>de</strong>l<br />

pecho. <strong>Gabriel</strong> se pasó la lengua por los labios.<br />

«Ahora viene la sonrisa seductora... Va a llegar en cinco, cuatro,<br />

tres, dos, uno... ahí está.» (Menos mal que en su actual estado <strong>de</strong><br />

ánimo, Julia era inmune a las sonrisas <strong>de</strong>rretidoras.)<br />

Soltándolo inmediatamente, dio un paso atrás y apartó la vista.<br />

No podía permitírselo. Mirarlo directamente cuando sonreía era como<br />

mirar el sol sin protección. <strong>Gabriel</strong> dio un paso hacia ella. La espalda

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!