05.09.2019 Views

El infierno de Gabriel_1

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

como para asistir al seminario <strong>de</strong>l día siguiente y pidiéndole que<br />

informara a <strong>El</strong> Profesor. Le agra<strong>de</strong>ció los correos que le había enviado<br />

y se disculpó por no haber respondido antes. Para acabar, le preguntó<br />

si le gustaría acompañarla a visitar la exposición sobre arte florentino<br />

que presentaba el Royal Ontario Museum cuando se recuperara.<br />

Al día siguiente, pasó casi toda la tar<strong>de</strong> redactando un correo<br />

provisional para la profesora Jennifer Leaming, <strong>de</strong>l Departamento <strong>de</strong><br />

Filosofía. La profesora Leaming era especialista en santo Tomás <strong>de</strong><br />

Aquino y también estaba interesada en Dante. Aunque Julia no la<br />

conocía personalmente, Paul había asistido a una <strong>de</strong> sus clases y le<br />

había gustado mucho. Era joven, divertida y muy popular entre los<br />

estudiantes, todo lo contrario que el profesor Emerson. Julia esperaba<br />

que aceptara dirigir su proyecto y en el correo se lo planteaba como<br />

una posibilidad.<br />

Le habría gustado consultarlo con Paul, pero sabía que éste<br />

asumiría que Emerson la había expulsado y que se enfrentaría con él<br />

por su culpa. Así que envió el correo a la profesora Leaming<br />

esperando que recibiera su propuesta <strong>de</strong> buena gana y que<br />

respondiera rápidamente.<br />

Cuando esa noche volvió a revisar su buzón <strong>de</strong> voz, se encontró<br />

con un nuevo mensaje <strong>de</strong> <strong>Gabriel</strong>:<br />

«Julianne, es miércoles por la noche. Te he echado <strong>de</strong> menos en<br />

el seminario. Tu sola presencia es capaz <strong>de</strong> iluminar una sala, ¿lo<br />

sabes? Siento no habértelo dicho antes.<br />

»Paul me ha dicho que estás enferma. ¿Puedo llevarte algo?<br />

¿Caldo <strong>de</strong> pollo? ¿Helado? ¿Zumo <strong>de</strong> naranja? Puedo hacer que te lo<br />

lleven a casa. No tendrías que verme. Por favor, déjame ayudarte. Me<br />

siento muy mal sabiendo que estás sola y enferma en tu apartamento,<br />

sin po<strong>de</strong>r hacer nada.<br />

»Al menos sé que estás en casa, a salvo, y no en un autocar en<br />

alguna parte. [Una pausa... Se aclara la garganta.]<br />

»Recuerdo haberte besado. Y recuerdo que tú me <strong>de</strong>volviste el<br />

beso. Lo hiciste, Julia. Lo sé. ¿No lo notaste? Hay algo entre nosotros.<br />

O al menos, lo hubo.<br />

»Por favor, necesito hablar contigo. No esperarás que justo<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> <strong>de</strong>scubrir tu i<strong>de</strong>ntidad, vaya a actuar como si no existieras.<br />

Tengo que explicarte unas cuantas cosas. Bastantes. Llámame, por<br />

favor. Sólo te pido una conversación. Creo que me la <strong>de</strong>bes.»<br />

<strong>El</strong> tono <strong>de</strong> los mensajes <strong>de</strong> <strong>Gabriel</strong> había ido aumentando en<br />

<strong>de</strong>sesperación. Julia apagó el teléfono, suprimiendo al mismo tiempo

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!