05.09.2019 Views

El infierno de Gabriel_1

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

espondió con monosílabos. <strong>El</strong>la le contó que había acabado todos los<br />

trabajos <strong>de</strong>l semestre y que Katherine Picton le había confirmado que<br />

le daría la nota antes <strong>de</strong>l 8 <strong>de</strong> diciembre, pero <strong>Gabriel</strong> se limitó a<br />

asentir, sin apartar la vista <strong>de</strong> la copa <strong>de</strong> vino, que pronto estaría<br />

vacía.<br />

Julia nunca lo había visto beber tanto. La noche que lo rescató<br />

<strong>de</strong> Lobby ya estaba borracho cuando ella llegó. Esa noche era muy<br />

distinto. No estaba contento ni coqueteaba, se lo veía atormentado.<br />

Con cada nueva copa <strong>de</strong> vino que vaciaba, Julia se preocupaba más.<br />

Pero cada vez que abría la boca para <strong>de</strong>cirle algo, él la miraba con<br />

tanta tristeza que no se atrevía. Estaba más frío y distante por<br />

momentos y, cuando le sirvió la tarta <strong>de</strong> manzana casera que había<br />

preparado la asistenta, Julia la apartó bruscamente y le exigió que<br />

hiciera callar a Maria Callas para que pudieran hablar.<br />

<strong>Gabriel</strong> la miró sorprendido ya que la tarta —y la Butterfly— eran<br />

la culminación <strong>de</strong> la cena. De su Última Cena.<br />

—¿Por qué? No pasa nada —refunfuñó, acercándose al equipo<br />

<strong>de</strong> música para quitar la ópera.<br />

—<strong>Gabriel</strong>, no me mientas. Es obvio que estás disgustado. Dime<br />

lo que pasa, por favor.<br />

Ver a Julianne, a la inocente Julianne, mirarlo con sus enormes<br />

ojos castaños y el cejo fruncido, era más <strong>de</strong> lo que podía soportar.<br />

«¿Por qué tiene que ser tan dulce y generosa? ¿Por qué tiene<br />

que ser tan compasiva? ¿Era obligatorio que tuviera una alma tan<br />

hermosa?»<br />

La culpabilidad que sentía aumentó. Era una suerte que no la<br />

hubiera seducido. <strong>El</strong> corazón <strong>de</strong> Julia se curaría antes así que si<br />

hubieran tenido relaciones. Sólo llevaban unas cuantas semanas<br />

juntos. Las lágrimas pronto se le secarían y podría encontrar un<br />

hombre bueno y constante, como Paul.<br />

La i<strong>de</strong>a le provocó náuseas.<br />

Sin una palabra, se acercó al bufet en busca <strong>de</strong> una licorera y un<br />

vaso <strong>de</strong> cristal. Se sentó y se sirvió dos <strong>de</strong>dos <strong>de</strong> whisky escocés. Se<br />

bebió la mitad <strong>de</strong> un sorbo y <strong>de</strong>jó el vaso en la mesa bruscamente.<br />

Esperó a que se aplacara el fuego que le quemaba la garganta.<br />

Confiaba en que se le contagiara algo <strong>de</strong>l valor líquido <strong>de</strong>l licor, pero le<br />

iba a hacer falta mucho más que eso para calmar el dolor en su<br />

corazón.<br />

Respiró hondo.<br />

—Tengo que contarte algunas cosas... cosas <strong>de</strong>sagradables. Sé

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!