08.05.2013 Views

La Revolucion Desconocida _Volin - fondation Besnard

La Revolucion Desconocida _Volin - fondation Besnard

La Revolucion Desconocida _Volin - fondation Besnard

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>La</strong> República Soviética Socialista no podrá ser fuerte sino cuando su administración sea<br />

ejercida por las clases laboriosas, mediante sindicatos renovados.<br />

¡A la obra, pues, camaradas obreros! Construyamos los nuevos sindicatos, libres de toda<br />

rémora. En ellos está nuestra fuerza.<br />

El número 8, del 10 de marzo, se ocupa sobre todo de acontecimientos de orden<br />

militar: el ataque a Kronstadt por los comunistas y su defensa.<br />

El número 9, del 11 de marzo, publica un ardoroso llamamiento «A los camaradas<br />

obreros y campesinos», algunos de cuyos pasajes esenciales transcribimos:<br />

Kronstadt ha comenzado una heroica lucha contra el odioso poder de los comunistas para<br />

la emancipación de los obreros y los campesinos. (…)<br />

Cuanto sucede actualmente es consecuencia de la obra de sangre y de ruina, prolongada<br />

desde hace tres años por los comunistas. <strong>La</strong>s cartas que nos llegan de los campos están llenas<br />

de quejas y maldiciones contra ellos. Y nuestros camaradas de regreso de la licencia en sus<br />

regiones nos han relatado, con la consiguiente indignación, los horrores perpetrados por los<br />

bolcheviques sobre toda la extensión del país. Y de añadidura, nosotros mismos hemos visto,<br />

oído y sentido cuanto ocurre en torno. Un intenso y desgarrador clamor de angustia nos llega<br />

de los campos y las ciudades de la Gran Rusia, que enciende nuestra indignación y arma<br />

nuestros brazos.<br />

No queremos el retorno al pasado. No somos sirvientes de la burguesía ni mercenarios de<br />

la Entente. Estamos por el poder de todos los trabajadores; no por la tiránica autoridad de un<br />

partido político cualquiera. No son elementos de Kolchak, de Denikin ni de Yudenich los que<br />

operan en Kronstadt, sino los mismos trabajadores. El buen sentido y la conciencia de los<br />

simples marinos, soldados y obreros de Kronstadt han encontrado, al fin, las palabras y el<br />

camino que nos permitirán salir del atolladero. (…)<br />

Al principio quisimos arreglarlo todo pacíficamente; pero los comunistas no quisieron<br />

ceder. Aún más que Nicolás II, ellos se aferran al Poder, dispuestos a anegar en sangre todo el<br />

país con tal de seguir reinando autocráticamente. Y he aquí que ahora Trotski, el genio<br />

malvado de Rusia, lanza contra nosotros a nuestros hermanos, cuyos cadáveres yacen a<br />

centenares sobre el mar helado en torno la fortaleza. Desde hace cuatro días se encarniza la<br />

lucha, truena el cañón, corre sangre fraterna. (…) Desde hace cuatro días los héroes de<br />

Kronstadt responden victoriosamente a todos los ataques de los enemigos.<br />

Como un gavilán, Trotski se cierne sobre nuestra heroica ciudad, que se mantiene firme.<br />

Todos estamos dispuestos a morir antes que capitular.<br />

Nuestros enemigos operan con kursanty, guardias comunistas especiales y tropas traídas<br />

de muy lejos, engañadas y compelidas por líneas de ametralladoras que las amenazan de<br />

atrás. (…)<br />

¡Camaradas obreros! Kronstadt lucha por vosotros, por los hambrientos y los transidos<br />

de frío, por los que carecen de vivienda y de abrigo.<br />

Mientras los bolcheviques permanezcan en el Poder no habrá posibilidad de vida mejor.<br />

Todo eso lo soportáis vosotros. ¿En nombre de qué? ¿Tan sólo para que los comunistas<br />

disfruten una vida de gozo y los comisarios engorden? ¿Os merecen todavía confianza.<br />

Informa el soviet de Petrogrado que el gobierno ha asignado millones de rublos de oro<br />

para la adquisición de productos, de los que cada obrero, según calcula Zinoviev, tendrá por<br />

valor de 50 rublos. Eso es, camaradas obreros, el precio por cabeza con que espera compraros<br />

la camarilla comunista. (…)<br />

¡Camaradas campesinos! Vosotros sois a quienes ha engañado y despojado más el Poder<br />

bolchevique. ¿Dónde están las tierras que habéis recuperado, anhelo de tantos siglos<br />

finalmente conseguido? Está ahora en manos de los comunistas o explotadas por los sovjoses.<br />

Y sólo os queda a vosotros contemplarla y lamentar el bien perdido. Se os ha quitado cuanto<br />

ha podido ser arrebatado. Estáis condenados al pillaje, a la ruina completa, agotados bajo la<br />

servidumbre bolchevique. Se os obliga a cumplir dócilmente la voluntad de los nuevos amos<br />

que os hacen pasar hambre, os tapan la boca y os dejan en la mayor miseria.<br />

¡Camaradas campesinos! Los de Kronstadt han levantado la bandera de la rebelión en la<br />

esperanza de que decenas de millones de obreros y campesinos respondan a su llamamiento.<br />

Es necesario que el alba que despunta en Kronstadt sea radiante sol sobre la Rusia toda. Es<br />

necesario que la explosión de Kronstadt reanime a la entera Rusia y en primer lugar a<br />

Petrogrado.<br />

Nuestros enemigos han llenado de obreros las prisiones. Pero son muchos aún los<br />

sinceros y audaces que están en libertad.<br />

¡Camaradas! ¡Levantaos a la lucha contra el absolutismo de los comunistas!<br />

227

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!