08.05.2013 Views

La Revolucion Desconocida _Volin - fondation Besnard

La Revolucion Desconocida _Volin - fondation Besnard

La Revolucion Desconocida _Volin - fondation Besnard

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

En diciembre de 1904 los obreros de la fábrica Putilov, una de las más<br />

importantes de San Petersburgo y en la que Gapon contaba con numerosos adeptos y<br />

amigos, decidieron comenzar la acción. De acuerdo con él, redactaron y remitieron a la<br />

dirección una lista de reivindicaciones de orden económico bastante moderadas. A fin<br />

de mes, fueron informados por la dirección que no consideraba factibles las mejoras<br />

solicitadas, a cuya aceptación el gobierno no podía forzarla. Además, despidió a algunos<br />

de los dirigentes obreros, cuya inmediata reintegración al trabajo fue exigida por los<br />

demás, reclamación igualmente rechazada.<br />

<strong>La</strong> indignación y la cólera de los obreros estallaron. Primero, por la infructuosidad<br />

de sus largos y laboriosos esfuerzos, y luego, porque se les había hecho creer que su<br />

acción no podría dejar de ser eficaz. Gapon les había hecho concebir esperanzas, y he<br />

aquí que su primer paso en la vía legal les reportaba un fracaso injustificado. Al par que<br />

abatidos, se sintieron moralmente obligados a intervenir por sus compañeros<br />

despedidos.<br />

<strong>La</strong>s miradas se fijaron en Gapon. Éste, para conservar el prestigio, simuló<br />

indignación como ellos y los incitó a insistir con más fuerza. Sintiéndose protegidos en<br />

sus reivindicaciones exclusivamente económicas, apoyados por las secciones y por<br />

Gapon, en numerosas reuniones tumultuosas decidieron declararse en huelga. El<br />

gobierno, confiando en Gapon, les dejaba hacer. <strong>La</strong> huelga de la fábrica Putilov fue la<br />

primera huelga importante en Rusia, iniciada en diciembre de 1904.<br />

Todas las secciones obreras se levantaron para defender la acción de los<br />

trabajadores de Putilov, comprendiendo que su fracaso sería el fracaso general. Gapon<br />

debió recorrer, una por una, todas las secciones, pronunciando discursos en favor de<br />

los huelguistas, e invitando a todos a apoyarlos eficazmente.<br />

Una agitación obrera extraordinaria invadía a San Petersburgo. Los talleres fueron<br />

espontáneamente abandonados. Sin orden, sin preparación ni dirección, la huelga de<br />

Putilov adquiría carácter general. Fue como una tempestad; los huelguistas se<br />

precipitaron en las secciones, sin atender formalidades ni vigilancias, clamando por la<br />

acción inmediata, porque la sola huelga no era suficiente; había que hacer algo grande,<br />

impresionante, decisivo. Tal era el sentimiento general.<br />

Entonces surgió, jamás se supo exactamente de dónde ni cómo, la fantástica idea<br />

de redactar, en nombre de los obreros y campesinos desheredados de todas las Rusias,<br />

una petición al Zar; de volcarse, para apoyarla, en grandes masas ante el Palacio de<br />

Invierno; de entregarla, mediante una delegación encabezada por Gapon, al Zar<br />

mismo, y solicitarle que escuchara la expresión de las miserias de su pueblo. Por<br />

ingenua y paradójica que pareciese, esta idea se extendió rápidamente entre los<br />

obreros de San Petersburgo; los unió, los inspiró y los entusiasmó, dando sentido y<br />

finalidad precisa al movimiento.<br />

<strong>La</strong>s secciones siguieron a las masas y se organizó la acción. Gapon fue encargado<br />

de redactar la petición, y aceptó. Los acontecimientos lo transformaron así en el<br />

conductor de un histórico movimiento proletario importante.<br />

A principios de enero de 1905, el documento quedó terminado. Estaba hecho en<br />

sencillo estilo, lleno de emoción, entusiasmo y confianza. <strong>La</strong>s miserias del pueblo se<br />

reflejaban en él con mucho sentimiento y sinceridad. Se pedía al Zar que aprobase las<br />

reformas solicitadas y velase por su cumplimiento. El petitorio de Gapon fue, sin duda,<br />

de alta inspiración, realmente patético. Se trataba ahora de que todas las secciones lo<br />

hiciesen suyo, de llevarlo a conocimiento de las vastas masas y de organizar la marcha<br />

al Palacio de Invierno.<br />

<strong>Revolucion</strong>arios pertenecientes a los partidos políticos, que se habían mantenido<br />

hasta entonces al margen del gaponismo, se acercaron a Gapon. Trataron, ante todo,<br />

de convencerlo para que el tono del petitorio y de la acción inmediata fuera menos<br />

servil, más digno, más firme, más revolucionario. Los medios avanzados ejercieron<br />

sobre él idéntica presión. Gapon se prestó a ello con bastante buena voluntad. Los<br />

socialistas revolucionarios, sobre todo, se le aproximaron. De acuerdo con ellos,<br />

modificó el texto del documento, extendiéndolo considerablemente y atenuando la<br />

expresión de fidelidad al Zar, de modo que constituyó una de las mayores paradojas<br />

históricas conocidas. Se dirigía muy lealmente al Zar y se le solicitaba, nada menos,<br />

25

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!